VALENCIA, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Teatro Rialto de Valencia pone en escena, desde este jueves y hasta el próximo 3 de marzo, el espectáculo 'El sueño de la razón', un espectáculo de la compañía Ferroviaria Escénica que retrata "al Goya más sombrío" a partir de la obra de Buero Vallejo.
La unidad de Teatro y Danza de CulturArts Generalitat ha programado este montaje, que dirige Paco Macià. La acción se desarrolla en las últimas semanas de residencia de Francisco de Goya en Madrid justo antes de autoexiliarse (diciembre 1823). Son tiempos sombríos para Goya, viejo y pesimista, es acosado por sus miedos, obsesiones, fantasías grotescas y contradicciones vitales de las que su mujer Leocadia es punto de mira. El artista escapa a través de su pintura más oscura, 'Las pinturas negras', de sus propios fantasmas y de la presión absolutista, cruel, represiva de Fernando VII, explica la Conselleria de Cultura en un comunicado.
Se trata de una coproducción de Cía. Ferroviaria y Teatro Circo de Murcia, sobre una obra de Buero Vallejo, que se encuentra de gira por España. El espectáculo adquiere "una especial relevancia y responsabilidad por basarse en la obra de uno de los dramaturgos españoles más relevantes del siglo XX", han subrayado sus responsables.
La obra viene de verse en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y estará en cartel en el Teatro Rialto de Valencia la próxima semana. El sueño de la razón es una obra de teatro de Antonio Buero Vallejo, estrenada en 1970, el título es una referencia a la pintura 'El sueño de la razón produce monstruos'.
PÚBLICO SORDO
En la función, el público se vuelve sordo cuando Goya está en escena, pues no oye el dialogo de los demás personajes, o solo los sonidos alucinatorios de su mente. En las pinturas que se incluyen en escena, desde el juego creativo propuesto por el escenógrafo Ángel Haro, la propia materia pictórica tiene un espacio significativo tanto en la evocación de los cuadros de Goya como en el espacio físico de actuación. Las proyecciones configurarán un imprescindible elemento estético y de comunicación.
Ferroviaria asume como propios los argumentos del autor de la obra, que define su puesta en escena como "obra total". Un espectáculo que mezcla necesariamente varios lenguajes, todos necesarios, todos pertenecientes a la realidad vital del protagonista que, traducidos teatralmente, conforman un tejido riquísimo de sensaciones para el espectador, concluyen las mismas fuentes.
