Fiscalía pide la nulidad del docuemnto y que una fundación de Madrid devuelva los casi siete millones de euros heredados
VALÈNCIA, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Una notaria de Carcaixent (Valencia) se enfrenta a cinco años de cárcel acusada de hacer firmar un testamento, que superaba los 12 millones de euros, a una mujer de 80 años ingresada en la Unidad de Daño Cerebral del hospital de Aguas Vivas tras haber sufrido un accidente cerebrovascular que le había dejado incapacitada para consentir el documento.
La acusada declarará al final del juicio, que ha arrancado este miércoles en la Sección Segunda de la Audiencia de Valencia. La Fiscalía solicita inicialmente cinco años de cárcel para la notaria por un delito continuado de falsedad dolosa en documento público y alternativamente 5.400 euros de multa y la pena de inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión durante un año por falsedad imprudente, según han informado fuentes jurídicas.
Asimismo, reclama la nulidad del testamento y que los 15 partícipes a título lucrativo devuelvan el reintegro de lo recibido. Entre ellos, figura una fundación de Madrid que percibió 6,8 millones de euros al haber sido declarada heredera universal. Los dos testigos de la firma, a quienes inicialmente Fiscalía pedía dos años y medio de cárcel como cooperadores necesarios, no será finalmente juzgados por razones de salud --ambos nacieron en los años 30--.
Los hechos sucedieron el 24 de agosto de 2012 cuando, según mantiene la acusación pública, la notaria acudió al centro sanitario con un documento de otorgamiento de testamento que había elaborado previamente en su despacho tras aparentar que se había redactado a petición de la anciana a la que, no obstante, hicieron estampar su huella digital, ya que esta no podía firmar.
No obstante, su redacción se había realizado a petición del testigo, que inicialmente estuvo procesado, que fue también quien llamó a la notaria a principios de agosto de 2012 comunicándole el delicado estado de salud en el que se encontraba la mujer y le pidió que realizara el testamento y los poderes.
La anciana, según Fiscalía, tenía graves alteraciones motoras, sensoriales y cognitivas, que la dejaron con una conciencia mínima y sin habla ni la posibilidad de comunicarse, por lo que no pudo consentir el contenido de los documentos.
Entre los herederos del testamento aparentemente otorgado por la anciana, además de la Fundación, se encontraban tres hijos de uno de los que actuó como testigo, a los que dejaba 650.00 euros a cada uno; así como el hijo de la otra testigo, al que legó la misma cantidad. También figuraba como legataria la esposa del primer testigo, a la que dejaba cinco cuadros, una talla y una tabla religiosa y un relicario.
El director clínico del servicio de daño cerebral del hospital Aguas Vivas puso el 21 de septiembre de 2012 en conocimiento de la Fiscalía estos hechos y un familiar lejano de la anciana también interpuso denuncia. El marido de la mujer había fallecido previamente y, al no tener hijos ni familiares cercanos, de no haber realizado testamento la herencia correspondería a la Generalitat.