Territorio y Medio Ambiente invierten un total de 230.000 euros para retirar las líneas eléctricas que afectan a rapaces

VALENCIA 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

La conselleria de Territorio y Vivienda y el Ministerio de Medio Ambiente invirtieron un total de 230.000 euros, a través de un convenio, para retirar las líneas eléctricas que afectan a las aves rapaces incluidas en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y reducir, de esta manera, su mortalidad, según informaron fuentes de la Generalitat.

El conseller de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, explicó que el objetivo de esta iniciativa es reducir la mortalidad por la electrocución de estas especies, puesto que ésta, dijo, "está considerada como una de las principales causas de mortalidad no natural de las aves de gran tamaño".

"Las actuaciones --añadió-- que se van a desarrollar, se centran fundamentalmente en la modificación y adaptación de los tendidos eléctricos en los que se ha detectado una mayor mortandad de aves".

El ámbito de actuación son las cuatro líneas de la Comunitat Valenciana: la línea de Loma de la Venta- La Cueva Serrana- El Campillo-Puntal Alto-Barranco del Búho-Casas de Rebate; la línea Peña del Águila de Arriba-Lomas de Muñiño, el Ventorrillo y Las Escalericas-Casa Bajosa-Alto de las Majadas; la línea San Miguel de Salinas-Casa El Escribano-Lo Quesada-El Espartal- Lo Ballesta-La Torena y, además, la línea Embalse de la Pedrera.

Posteriormente, se acometerán modificaciones en otros tendidos eléctricos de peligrosidad alta de la Comunitat. Sobre estas líneas se efectuarán trabajos como la modificación de las cabeceras de apoyo y de las crucetas ya que los aisladores suspendidos son mucho menos peligrosos que los actuales aisladores rígidos y en el mismo plano.

Asimismo, en algunos casos será necesario aislar la fase central en las bóvedas para impedir que la posada de un ave de tamaño medio en el interior de la bóveda pueda provocar su electrocución al tocar la fase central con la cabeza. Además, deberá aumentarse la distancia del lugar de posada y los conductores para evitar que un ave de gran tamaño pueda electrocutarse al estirarse mientras esté posada en la bóveda.

Otra de las actuaciones previstas es el aislamiento de los elementos de alta tensión que supongan riesgo de electrocución en los postes de amarre. Todo ello, apuntaron, para evitar la desaparición de especies importantes como el águila perdicera o el águila real que ya se encuentran amenazadas o en peligro de extinción.

El águila perdicera es una de las especies más afectadas por la electrocución. Esta rapaz figura en la categoría de 'Vulnerable' en el Catálogo Nacional y en el Catálogo Valenciano de Especies Amenazadas.

Otras aves rapaces a las que afecta la electrocución son el águila culebrera, el águila pescadora y el búho real, todas incluidas tanto en el Catálogo Nacional como en el Valenciano de especies amenazadas, señalaron.