VALENCIA 16 May. (EUROPA PRESS) -
El Hospital General de Valencia implanta la cirugía endovascular precutánea para las personas afectadas por falta de circulación de la sangre en los miembros inferiores que les permite caminar a las cinco horas de ser intervenidas y se les da el alta a las 17 horas, mientras que con el tratamiento convencional tardan 10 meses en caminar y la estancia de hospitalización es de 11 días, según informaron fuentes del centro hospitalario en un comunicado.
La intervención se realiza con el paciente despierto bajo vigilancia anestésica monitorizada y se da el alta a las diecisiete horas. El Instituto Cardiovascular, en el que se integra el Servicio de Cirugía Vascular, ha puesto en marcha este tipo de procedimiento de alta resolución en la Comunitat Valenciana, según la misma fuente.
La enfermedad arterial crónica de las extremidades aparece como consecuencia de la disminución "lenta y progresiva" del flujo sanguíneo y, por tanto, del aporte de oxígeno a los grupos musculares de los miembros inferiores. La progresión de la enfermedad es "lenta y, en el ámbito nacional, presenta un riesgo de amputación mayor del 23 por ciento de las intervenciones vasculares, de las que el 41 por cien son mujeres y el 51 por cien varones".
Con el tratamiento convencional, la estancia de hospitalización por este diagnóstico es de 11 días, con un coste promedio entre 1.165 a 4.000 euros, y con un coste anual por hospital de 230.000 euros.
Dentro del Instituto Cardiovascular, el Servicio de Cirugía Vascular del Hospital General, en colaboración con el Servicio de Cirugía Mayor Ambulatoria, está implantando el tratamiento endovascular completado con implantes de stent (pequeño tubo de malla de acero autoexpandible) para reabrir los vasos sanguíneos estrechados u obstruidos, con lo que consigue una reevascularización completa del miembro afectado.
Con esta operación, que se hace en régimen de corta estancia, las personas afectadas pueden caminar a las cinco horas de ser intervenidas y permanecen en el hospital doce horas de observación como medida de prevención, con lo que el total del tiempo de permanencia es de diecisiete horas.
"Convencionalmente, los enfermos que presentan este tipo de enfermedad tardan en resolverla al menos diez meses. Con el procedimiento endovascular lo hemos conseguido en cinco horas. La operación en sí tiene una duración de una hora y media, después el paciente permanece en el hospital para verificar que la coagulación va bien y que todo sea normal", explicó Joaquín Todolí, jefe del Servicio Cirugía Vascular.
En el Hospital General ya se han hecho ocho casos en las tres semanas en las que se ha implantado este procedimiento. Todos los pacientes han tenido los mismos tiempos de solución y todos ellos "han podido andar a las cinco horas de ser intervenidos".
La enfermedad arterial crónica se debe principalmente a la acumulación de grasa dentro de las paredes de las arterias o vasos sanguíneos, que se bloquean causando una obstrucción que puede hacer que la sangre no fluya de forma adecuada. Su principal síntoma es que el paciente siente dolor después de haber caminado una distancia no muy larga.
Según este experto en cirugía vascular, en los dos primeros estados "el 20% de los pacientes se solucionan con medicación y abandono de los factores de riesgo de enfermedad vascular". Entre los factores de riesgo se encuentra el tabaco, colesterol, triglicéridos, diabetes, obesidad, hipertensión arterial y sedentarismo.
Se interviene clásicamente a partir de que el paciente puede caminar menos de 150 metros y con estas técnicas endovasculares, además del tratamiento de los factores de riesgo, pueden llegar a mejorarse el 100% de los pacientes. Otra gran ventaja de este procedimiento es que permite "que se disminuyan los riesgos de la intervención y que el paciente tenga un mejor postoperatorio", indicó.