Bruselas pide nuevas reglas para las ayudas al cine en favor de producciones transfronterizas

Actualizado: martes, 30 abril 2013 16:25

BRUSELAS, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea quiere revisar los criterios que se aplican en la Unión Europea para autorizar ayudas públicas nacionales al cine, con el objetivo de equilibrar las oportunidades que ofrecen los distintos Estados miembros y favorecer las producciones transfronterizas.

Bruselas apuesta por extender la posibilidad de conceder ayudas a todo el proceso, desde que se idea hasta que llega a los cines, y no limitarlas al proceso de producción, como ocurre ahora, según el borrador de propuesta revisado que hasta el próximo 28 de mayo someterá a la consulta pública de todos los grupos interesados.

Además, la Comisión sopesa calcular las ayudas en base al presupuesto total de la cinta, aunque se vaya a rodar o producir en distintos países del espacio económico europeo, y no sobre el reservado al lugar en donde se solicita el apoyo financiero.

"Las nuevas reglas pretenden favorecer el éxito del sector audiovisual europeo y permitirle producir películas que gusten al público europeo. El objetivo es alentar la creación y diversidad cultural en toda la Unión Europea y apoyar un cine realmente europeo, al facilitar la puesta en marcha de producciones transfronterizas", ha declarado el comisario de Competencia, Joaquín Almunia.

El Ejecutivo comunitario espera también que su propuesta sirva para armonizar y "reconciliar" las diferencias que los gobiernos nacionales mantienen sobre el apoyo público al cine.

La propuesta apunta la conveniencia de "estimular iniciativas comerciales no subvencionadas", por lo que recomienda que los apoyos públicos se limiten en principio a un 50 por ciento del presupuesto de la producción, si bien prevé elevar al 60 por ciento la ayuda de un país para las producciones transfronterizas financiadas por más de un Estado miembro.

Con todo, estos límites no se aplicarían a los filmes "difíciles", es decir, cortometrajes, primeras obras de un creador o con bajos presupuestos, ni a los coproducidos con países en desarrollo.

Además, Bruselas señala que los subsidios no pueden reservarse a partes específicas de la producción, sino contribuir al presupuesto total y el productor deberá poder elegir las partidas que se gastarán en otros Estados miembros, para garantizar la neutralidad del apoyo y evitar que condicione "preferencias nacionales", lo que sería contrario a las normas de la UE.

Las normas europeas sobre ayudas de Estado que establecen los criterios con los que se evalúa la compatibilidad de los apoyos locales, regionales y estatales al sector audiovisual y cinematográfico expiraron en diciembre de 2012 y por ello plantea la revisión.

Según datos comunitarios, los Estados miembros destinan cada año unos 3.000 millones de euros en ayudas al cine, de los que 2.000 millones so ofrecen a través de garantías y créditos blandos y otros 1.000 millones corresponden a incentivos fiscales. De estos subsidios, el 80 por ciento sirve para apoyar la producción de películas, sobre todo en España, Francia, Reino Unido, Alemania e Italia, que son los países que más pagos conceden.