MADRID 14 May. (EUROPA PRESS) -
Las ayudas a "priori", que sustituirán las ayudas a la amortización del cine, tendrán que ser reembolsadas en caso de que la película subvencionada alcance un éxito comercial, según han explicado fuentes del Ministerio de Cultura.
Cultura entiende que con el actual modelo de ayudas se producía una sobrefinanciación que conllevaba casos en los que determinados largometrajes contaban con dos vías de financiación: por un lado las citdasa yudas y, por el otro, el éxito de taquilla.
Según ha confirmado el presidente de la Confederación de Productores Audiovisuales (FAPAE), Ramón Colom, con la nueva reglamentación --tramitada a través de un Real decreto Ley-- se buscará introducir los criterios de "rentabilidad" respecto a estas devoluciones. Además, ha adelantado que cuando se devuelva ese dinero, se prevé que vaya a parar de nuevo al fondo de ayudas, para financiar otros trabajos.
Las ayudas se otorgarán a través de una puntuación automática con la que el ministerio pretende eliminar la subjetividad en las concesiones. Además, tendrán en cuenta, entre otros criterios, la viabilidad económica del proyecto; la capacidad de los productores para "distribuir y producir un rendimiento económico importante" o el carácter "innovador".
El ministro de Cultura, José Ignacio Wert, ha señalado que este sistema contará con un "periodo transitorio" de tres años en el que coexistirán las ayudas a la amortización y las ayudas anticipadas, que comenzarán a aplicarse a partir de enero de 2016.
Así, en el año 2016 las ayudas que concederá el Estado para la amortización de largometrajes (ayudas a posteriori) alcanzarán los 35 millones de euros; en 2017, los 30 millones de euros y en 2018 en torno a los 15-20 millones de euros.
Estas ayudas convivirán con las nuevas (a priori), que en estos tres años serán de 30 millones de euros cada uno, y con otras ayudas a películas independientes (10 millones de euros cada año). A partir de 2019, no habrá ayudas a la amortización.
PAGOS POR PLAZOS
Las nuevas ayudas serán repartidas a priori, si bien el pago se desgranará previsiblemente también por plazos, repartiendo un primer porcentaje al conceder la ayuda, otro con el inicio del rodaje y el resto de la ayuda con la calificación de la película.
Además, fuentes ministeriales han confirmado que todavía faltan por cerrar algunas bases de esas ayudas automáticas, entre ellas el establecimiento del importe máximo de las cuantías para un sólo título (a día de hoy, establecido en 1,5 millones de euros).
"El problema grave era cómo compatibilizar dos modelos distintos, era un sistema complejo", ha resaltado Colóm, quien ha matizado que los productores "en general" se han mostrado de acuerdo, salvo algunas excepciones. "Algunos se quedarían con el que hay, porque les vale, pero pensamos que el nuevo modelo por justicia tiene que ser lo más automático posible", ha añadido.
Este sistema será tramitado como Real Decreto Ley y Cultura espera que para finales de junio o principios de julio sea convalidada en el Congreso. Posteriormente, el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) hará el reglamento del desarrollo, de tal manera que estén listas para el 1 de enero de 2016. El Ministerio mantendrá hasta julio de esta año el modelo de amortización actual.
NÚMERO DE PELÍCULAS EN ESPAÑA
Durante la rueda de prensa del Consejo de Ministros, Wert ha aseverado que se han producido un número de películas excesivo". Colom ha establecido en 130 el número de películas "industriales" en España en 2014, cuando a su entender deberían situarse en torno a las 48-50 por año.
"Nos referimos a películas industriales aquellas que se hacen de una manera determinada, cuando se empiezan los largometrajes y se sabe qué se van a acabar, que cuentan con un plan de márketing, un plan de dsitribución... Luego habrá otras películas, pero los mismos creativos se darán cuenta si van a tener éxito o no", ha añadido.