MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
La Federación Internacional de Asociaciones de Productores (FIAPF) cifran en 8,2 millones de euros la pérdida de ingresos para la industria cinematográfica que supondría la aplicación del mercado único digital, planteado por la Comisión Europea en 2015, tal y como revela el informe 'The impact of cross-border access to audiovisual content on EU consumers', presentado en el marco del Festival de Cannes.
Este informe, realizado por Oxera and O&O, analiza el impacto de la nueva estrategia del mercado único digital en la Unión Europea, cuyo objetivo es facilitar el acceso transfronterizo de contenidos en línea de un país comunitario a otro, según explica la Confederación de Productores Audiovisuales Españoles (FAPAE) en un comunicado.
La Comisión Europea argumentó que esta medida "traería mayor beneficio a los consumidores", pero este estudio presentado por FIAPF, en la que se enmarca la española FAPAE, sugiere que se provocaría una pérdida de "bienestar de los consumidores" evaluada en 9,3 mil millones de euros.
Además, los productores europeos consideran que esta medida tendría como consecuencia un descenso del 48 por ciento para los contenidos de televisión y un 37 por ciento para películas.
Este informe, que ha sido realizado en los 28 países miembros de la Unión Europea, concluye que, además, los títulos extranjeros también se verán afectados negativamente y señala que "en lugar de mejorar la elección del consumidor, como pretende la Comisión Europea, este cambio erosionará la explotación territorial y conducirá a un enorme coste para el público, así como de la economía creativa europea, amenazando la diversidad cultural tanto en la producción y distribución".
El presidente de FAPAE, Ramón Colom, opina que el modelo puesto sobre la mesa por Europa sobre el Mercado Único Digital implica un cambio de 180 grados en los procesos de producción, comercialización y financiación de las producciones audiovisuales, hasta el límite de poder poner en riesgo la viabilidad de la industria independiente".
"La situación nos lleva a oponernos a un cambio tan radical sin que se prevea una consideración especial en el sector audiovisual de las nuevas medidas adoptadas y se valore en cada fase el impacto real que las modificaciones suponen", ha añadido Colom.
