"La tolerancia se impone y espero que los conservadores dejen de lamentar la inmigración", afirma Hanna Schygulla

EP
Actualizado: jueves, 13 marzo 2008 17:50


MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

La actriz Hanna Schygulla presentó hoy en Madrid 'Al otro lado', la última película de Fatih Akin, que se estrena en España mañana, y que abre una puerta al debate sobre las fronteras de la Unión Europea. En esta coproducción turcoalemana, que habla de solidaridad y de la mezcla de culturas, la que fuera musa de Fassbinder da vida a una madre alemana que viaja a Turquía tras la muerte de su hija, que ha seguido hasta ese país a su amiga, una activista política kurda.

"La tolerancia se impone y tengo la esperanza de que los conservadores dejen de lamentar que estamos invadidos y mezclados por la inmigración", afirmó la actriz alemana, convencida de que los patriotismos "no son buenos". "La realidad es otra y siempre hemos estado muy mezclados de diferentes culturas y raíces", apuntó.

En esta ocasión, Akin ('Contra la pared') profundiza en 'Al otro lado' de nuevo en las relaciones entre dos sistemas políticos, el alemán y el turco, mediante la historia de seis personajes atrapados entre diferentes culturas y generaciones.

Por un lado está Nejat (Baki Daurak), un profesor universitario en Alemania, hijo de inmigrantes turcos. Su padre Ali (Tuncel Kurtiz), viudo desde hace años, decide llevar a vivir a su casa a Yeter (Nursel Köse), una prostituta también turca que hace años que no sabe nada de su hija Ayter (Nurgüi Yesilcay), un activista kurda que vive en Turquía.

ASILO POLÍTICO

Los acontecimientos conducen a Nejat a viajar a Estambul en busca de Ayter, pero ésta ha viajado a Bremen en busca de su madre y de asilo político. La joven conocerá a Lotte (Patricia Ziolkowska) de la que se hace inseparable, pese a la oposición de su madre Susanne (Schygulla).

Schugulla explicó, en perfecto español, que su papel en 'Al otro lado', galardonada por el Parlamento Europeo con el I Premio 'Lux' por retratar temas sociales actuales y reflejar las diferencias culturales entre alemanes y turcos, es el de una madre que se enfrenta a su hija cuando le lleva a casa una extremista. "¿Cómo puede comportarse?", se preguntó la actriz, que actualmente reside en París.

La actriz, que también ha trabajado a las órdenes de directores como Schlöndorff, Wenders, Godard, Ferrari, Scola o Saura, habló de la solidaridad humana y de cómo si uno no da el primer paso hacia el otro la soledad siempre nos acompañará. "Hay que pasar de la soledad a la solidaridad", precisó.

ACERCAMIENTO CULTURAL

En cuanto a lo que aporta 'Al otro lado', Schygulla destacó que muestra seis puntos de vista diferentes. "Cada uno de los personajes ve la vida de una forma", dijo, precisando que todos ellos acaban viviendo "un acercamiento cultural". "La película son puertas que van quedando abiertas", apuntó sobre un filme que habla de "la muerte como elixir".

Junto a Schygulla estuvo en la rueda de prensa el representante del Parlamento Europeo Ignacio Samper, quien subrayó que la película "abre un debate" sobre la incorporación de Turquía a la UE. "Alemania es una sociedad dividida, como ocurre en toda la UE. Akin abre diferentes frentes a debatir en este filme, como el terrorismo, la inmigración, las culturas o el integrismo", dijo.

En cuanto a cómo lograr un mundo mejor, Schygulla señaló que espera que se acabe con el capitalismo, si bien los cambios hay que comenzarlos uno mismo y no esperar a que vengan de fuera. "Hay que transformar la angustia en liberación", matizó la actriz, quien recordó que su nombre, Hanna, "que suena a muy judío" se lo puso su madre en plena Segunda Guerra Mundial "de forma inconsciente contra el nazismo".