Ferran Adrià lamenta la "mala fe" de la familia de su exocio que reclama el 84% de El Bulli

Ferran Adrià en el juicio
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 31 octubre 2012 15:30

BARCELONA, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -

El cocinero catalán Ferran Adrià lamenta "las manipulaciones y la mala fe" de los familiares de su exocio Miquel Horta que le exigen el 84 por ciento del negocio del restaurante El Bulli --67 millones de euros-- porque acusan al chef y a su socio, Juli Soler, de haberle engañado al comprarle su parte del negocio por una cantidad inferior aprovechando que sufría un trastorno bipolar desde hacía 30 años.

Así lo ha manifestado este miércoles Adrià en declaraciones a los medios en la Ciudad de la Justicia, tras la última sesión del juicio civil que parte de un préstamo de 47 millones de pesetas que Horta hizo al chef en 1994 y por el que le ofrecieron el 20 por ciento de la acciones a cambio, si bien en 2005 Horta vendió su parte a Adrià y Soler por 200 millones de las antiguas pesetas, cantidad que la familia considera insuficiente.

"Lo que me preocupa es que alguien dude de nuestra honestidad y ética porque vamos a hacer un proyecto para toda la gente del país", ha recalcado Adrià en referencia a la creación de la fundación El Bulli que está diseñando y que se centrará en la investigación e innovación gastronómica.

Durante el juicio, el letrado defensor ha utilizado como última carta el auto del Juzgado de Instrucción 32 de Barcelona de noviembre de 2009 que archivaba una querella presentada también por los familiares de Horta por un presunto delito de estafa, al alegar los mismos argumentos que en la presente causa, eso es, que el chef engañó a su exsocio sabiendo que sufría una enfermedad psiquiátrica.

La sesión se ha basado, en parte, en determinar la capacidad de Horta para tomar este tipo de decisiones cuando vendió en 2005 su 20% de las acciones a sus entonces socios, a lo que la defensa ha argumentado que hasta 2010 no se dictó la sentencia que lo invalidaba y que "si la enfermedad era tan evidente, no hay excusa para que la familia evitara la venta".

Sin embargo, el abogado de los demandantes ha sostenido: "Era un incapaz y un infeliz y todo el mundo lo sabía. Sabían de sus debilidades", a lo que ha añadido que Horta --ahora interno en un centro psiquiátrico-- ha sufrido mucho porque se sentía como el padre de Adrià, quien ha destrozado la vida familiar, ha dicho.

Esta parte también ha remarcado que la cantidad que le reclaman supondría una propina, al afirmar que en un año El Bulli pasó de ganar cuatro millones de euros a nueve, negando que la demanda se haya interpuesto para "sacar tajada".

VALOR DE MARCA

El valor de la marca del restaurante --"¿Qué fue antes? ¿El Bulli o Ferran Adrià?, ha preguntado la acusación"-- ha centrado los interrogatorios de los peritos aportados por cada parte que han ofrecido versiones contrapuestas.

La demandante ha mantenido que "las marcas sobreviven a las personas", destacando la capacidad de empresas como Apple y Christian Dior continúan teniendo valor tras la muerte de sus impulsores, como opinan que también sucede en el caso de El Bulli.

No obstante, el perito de la parte demandada ha planteado que, aunque se pueden institucionalizar los conocimientos, si el creador abandona el negocio, éste se interrumpe o por lo menos se desvaloriza: "El restaurante es un soporte; el valor está en la persona".