La galería Rayuela rescata las obras de denuncia social de Rafael Canogar en la exposición 'Memoria'

Actualizado: miércoles, 10 mayo 2006 15:00


MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -

La galería de arte Rayuela de Madrid inaugura mañana una exposición individual de Rafael Canogar (Toledo, 1935) titulada 'Memoria'. La muestra está dedicada a su etapa realista de denuncia social de finales de los sesenta y principios de los setenta. El conjunto de obras lo forman trece técnicas mixtas sobre papel y tres piezas de gran formato, una sobre tabla y dos sobre tela. La mayoría de las obras están fechadas entre 1969 y 1975.

Según explican los responsables de la Galeria Rayuela estas obras son de una "extraordinaria calidad artística" y de un "indiscutible interés cultural", ya que en su momento aunaban la última vanguardia surgida después del informalismo con el compromiso social del artista respecto a la sociedad que le rodeaba.

ESCAPARATE REAL

Estos años fueron una de las etapas más importantes del arte español de la segunda mitad del siglo XX; por la valentía personal de los artistas y porque las obras, además, eran el escaparate real de España en el exterior y el apoyo a los que intentaban desde dentro, cada día, luchar por la libertad arrebatada.

Rafael Canogar (Toledo, 1935) fue discípulo de Vázquez Díaz, se inicia imitando el estilo del cubismo de Picasso y de Braque y del surrealismo de Joan Miró, hasta evolucionar hacia la abstracción informalista. En el año 1957 se convierte en uno de los miembros del grupo 'El Paso' junto a Manuel Millares, Antonio Saura, Luis Feito, Manuel Rivera, Pablo Serrano, Juana Francés y Antonio Suárez y en el año 1960 participó en la exposición de New Spanish Painting and Sculpture del Museo de Arte Moderno (MOMA) de Nueva York junto a exponentes de las jóvenes vanguardias.

A comienzos de la década de 1960, abandona la corriente informalista para acercarse a la realidad y describirla, consciente de la fuerte influencia que ejerce en los medios de comunicación. Su paleta reduce el cromatismo a juegos de blancos y negros y retorna poco a poco a la abstracción que descubrió en París. En su técnica, Canogar evoluciona desde el uso casi exclusivo del óleo sobre tela al uso de otros materiales como poliéster, acrílico, madera y fibra de vidrio, que le sirve para componer sus collages y obras de arte en las que estas técnicas mixtas combinan objetos de diversa naturaleza, creando como resultado obras que son mitad escultura y mitad pintura.

En 1972 fue Premio de la Bienal de Sao Paulo y en 1983 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas.