El Museo Thyssen abre sus puertas a las pinturas serigrafiadas del estadounidense Robert Rauschenberg

Actualizado: martes, 7 noviembre 2006 10:00


MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Museo Thyssen-Bornemisza abre sus puertas a la tinta serigrafiada del estadounidense Robert Rauschenberg. La muestra, que se inaugura hoy, reúne un total de dieciséis obras y pretende mostrar y documentar el proceso por el que el artista llegó a la técnica de óleo y tinta serigrafiada, una de sus más importantes innovaciones.

Esta exposición, patrocinada por la Fundación Caja Madrid, es también la primera muestra del este Museo dedicada a un artista vivo, que se convirtió, junto a Andy Warhol, en uno de los pioneros en utilizar la serigrafía.

Este método permitió a Rauschenberg incorporar en sus obras imágenes fotográficas ampliadas sobre paneles de seda sensibilizada, que luego transfería al lienzo. Las imágenes agrandadas eran reproducciones de fotografías suyas o de recortes de revistas, con acontecimientos históricos o de la actualidad.

En palabras de la comisaria de la muestra, Barbara Rose, Rauschenberg quería ser "testigo del tiempo" capturando y congelando el momento. Pero sus obras son también un "homenaje a los maestros antiguos". "Con esta exposición, Rauschenberg entra en el panteón de los grandes maestros de la pintura".

EL MOVIMIENTO DE 'EXPRESS'

El lienzo 'Express', realizado por Rauschenberg a comienzos de los años 60, es uno de los protagonistas de esta muestra y una de las pinturas serigrafiadas más importantes entre las que Rauschenberg realiza a comienzos de la década de los sesenta. Asimismo, con esta obra Rauschenberg fue el primer norteamericano en ganar el primer premio en la Bienal de Venecia de 1964.

Algunas de las fotografías que reproduce en este óleo ya habían sido utilizadas en otros trabajos y se repetirán en obras posteriores. Tanto el título como las imágenes que aparecen sugieren la idea de movimiento, velocidad y coordinación: un jinete sobre su caballo en el momento de saltar una valla, un grupo de bailarines en acción -sin duda, un homenaje a su amigo Cunningham-, un escalador encordado, o un desnudo bajando las escaleras, en clara alusión a la famosa obra de Duchamp, ya mítica en los Estados Unidos.

"Refleja la lucha del progreso y la tecnología contra el espíritu de la guerra", señaló la comisario de esta muestra, que permanecerá abierta hasta el próximo 17 de enero.

DENUNCIA DE LA GUERRA

La guerra de Vietnam, la guerra civil americana o las actividades militares forman así parte de muchas de sus serigrafías como una denuncia de la guerra en un país, que tras superar su participación en la II Guerra Mundial, protagonizó algunos conflictos internacionales. No obstante, Rauschenberg mostró su optimismo cuando llegó a la presidencia John F.Kennedy, quien representaba "lo mejor de Estados Unidos", apuntó Barbara Rose.

Junto a 'Express', la exposición reúne un total de dieciséis obras: otros seis óleos serigrafiados realizados en los años 1962 y 1963, una selección de ocho Cantos pertenecientes a una serie de treinta y cuatro ilustraciones sobre el Infierno de Dante -prestadas por el MOMA de Nueva York- y una obra sobre papel.

Como corresponde a este tipo de exposiciones cuyo objetivo es el estudio en profundidad de una obra de la colección del Museo, este conjunto de obras presenta en un mismo espacio permite no sólo contextualizar el óleo Express, sino también analizar la invención de la técnica de transferencia que Rauschenberg comenzó a desarrollar en el año 1958 y que le permitió, a partir de entonces, reconciliar la pintura gestual y artesana con imágenes fotográficas.

"Las pinturas serigrafiadas constituyen la brillante y audaz solución de Rauschenberg al problema de la reconciliación entre figuración y abstracción pictórica. El artista logró esta unión de opuestos a través de una gradual simbiosis de la pintura con los procesos que le permitían trasferir al lienzo imágenes fotográficas grabadas y reproducidas de forma mecánica", explica la comisaria en el catálogo de esta muestra, que se complementará el día 28 de noviembre con una sesión musical titulada 'Encuentro Rauschenberg/Cage. Música y Performance', en la que se pretenden mostrar de forma conjunta la obra de estos dos artistas amigos y compañeros.

En este sentido, el conservador-jefe del Museo Thyssen-Bornemisza, Guillermo Solana apuntó, que de ahora en adelante, el Museo dedicará parte una parte de su atención a los grandes maestros contemporáneos. Algunos de los cuales ya cuelgan de las paredes del Thyssen. Entre ellos Lucien Freud, Auerbach y Kossof, David Hockney o Richard Estes.