MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los Reyes entregaron hoy en el Museo del Prado el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2007 al pintor Luis Gordillo (Sevilla, 1934) en el transcurso de un acto celebrado en la popular sala de 'Las Meninas', y al que asistió también la ministra de Cultura, Carmen Calvo, el director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, y personalidades del mundo artístico y académico.
A lo largo de su discurso, el artista hizo un repaso por su trayectoria recordando su primera etapa de acercamiento a las vanguardias a través del informalismo a las que siguió el Pop Art, el geometrismo y el psicoanálisis. "Esta dinámica del psicoanálisis me produjo cambios a nivel personal y artístico y ha influido en mi manera de trabajar que se realizaría de esta forma: comprometerse con la mayor cantidad de libertad que se pueda digerir y posteriormente conseguir una ordenación y un sentido", señaló. Sin embargo, para Gordillo, el nombre que mejor vendría a su estilo pictórico sería el de "crisismo", afirmó en alusión a sus "repetidas crisis".
El artista, que reconoció que algunas veces se le ha considerado "figura puente" entre generaciones, no olvidó tener unas palabras de recuerdo para algunos de sus antecesores en la consecución de este galardón: Antoni Tapies "al que veneré en mis primeros años de pintor" --dijo--; Pablo Palazuelo "con el que he mantenido una relación de mutua amistad y admiración"; y Antonio López "al que veo como un hermano o compañero de camino", agregó.
Luis Gordillo reconoció al final de su discurso que sus inicios, y la energía creada por las tensiones de ese momento artístico, fueron los que pusieron "los cimientos" de su trabajo. "Desde el final de los setenta hasta ahora mi pintura ha sido mayoritariamente abstracta y es la que yo prefiero, sobre todo la de los noventa y la de los últimos años", concluyó.
INVESTIGADOR INFATIGABLE
Por su parte, el Rey señaló durante su intervención el carácter de "referente irremplazable" para la creación artística española que ha demostrado Gordillo. El monarca aludió a su "inmenso amor por la pintura" y a su "labor reflexiva, lenta y metódica, irrenunciable coherencia y profundo rigor".
Don Juan Carlos elogió también al artista por ser "investigador infatigable del color" y por ofrecer "una indagación introspectiva, íntima y personal" y "una reflexión sobre su propia naturaleza, nutrida de subjetividad".
Por su parte, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, se refirió a la "influencia" ejercida por Luis Gordillo en gran número de artistas españoles y calificó su trayectoria de "abierta, comprometida y marcada por un continuo desafío".
"Su obra ha estado siempre inmersa en una continua reelaboración" y "su forma de trabajar responde a un deseo de ordenar la libertad", agregó Calvo para quien la obra del artista sevillano "siempre ha provocado una gran controversia estética".
El premio Velázquez está dotado con 90.000 euros y el galardonado tiene, además, la facultad de elegir, en los seis meses siguientes a la concesión del Premio, a otro artista menor de 35 años como receptor de la Beca Velázquez, de un año de duración, dotada con 30.000 euros. Asimismo, el Ministerio de Cultura organizará, a través del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, una exposición de la obra de Gordillo.
