MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
"A los adultos no se les ofrece música clásica en radio o televisión, así que es imposible que les guste", ha señalado el músico y periodista Fernando Argenta, con motivo de la publicación de 'Pequeña historia de la música' (Espasa), un manual dedicado al público infantil en el que recorre las obras y la vida de los autores clásicos más importantes de todos los tiempos.
Argenta considera que la gente sólo consume lo que es "más sencillo, básico y que no cuesta trabajo pensar". Además, según ha indicado en declaraciones a Europa Press, "hoy en día se está pendiente de vender, y se piensa que se vende mejor una canción de dos minutos, y no una sinfonía de Beethoven que siempre estará ahí".
Por ello, en esta ocasión vuelve a dirigirse a los más pequeños para narrar de forma atractiva y divertida la historia de la música clásica. Así, a través de aspectos curiosos y anécdotas, el autor llama la atención de los jóvenes con "ganas de saber y aprender" para recorrer los grandes hitos de periodos como la Prehistoria, el Mundo Antiguo, en Renacimiento, el Barroco, el Clasicismo o el Romanticismo del XIX.
Argenta señala que existen "cientos" de autores en la historia de la música que son desconocidos, por ejemplo del Renacimiento, aunque en algunos casos hayan tenido mucha importancia en la evolución de la música, por lo que este manual trata de conseguir que los niños puedan relacionar lo que escuchan con el periodo al que pertenece.
Otro de los apartados de este libro está dedicado a la música popular, como el rock, el pop o el jazz, un capítulo con el que el autor pretende hacer comprender que aunque el pop "está muy bien", no es incompatible con el resto de la música clásica y no ha nacido por casualidad. "No es la única música moderna, ahora se escribe música clásica mucho más avanzada que el pop, que es bastante antigua y bastante simple", añade.
"LA ENSEÑANZA ESTÁ MAL ENFOCADA"
Uno de los retos de este libro es, según señala, narrar la historia como un cuento de manera que a los lectores les resulte entretenido. Sin embargo, el inconveniente es que para explicarlo bien "hay que introducir términos técnicos". "No he querido quedarme en la superficie, así que, aunque es un libro divertido, también aprenden cuál es la verdadera historia de la música", indica.
Uno de los problemas en la enseñanza básica es que la música es considerada una "maría" y no se le da la importancia que tiene en la cultura general, según lamenta Argenta, y sin embargo ha de tener un "peso importante".
"Está mal enfocada, es preferible que en la hora semanal que tienen puedan escuchar música de distintos estilos y épocas -uno de los grandes problemas, a su juicio-, en vez de enseñarles lo que vale una negra con puntillo, que se les va a olvidar y no tiene ningún sentido".
Por ello, el autor de 'Pequeña historia de la música' considera que "lo primero que ha de hacer la enseñanza es atraerles y que conozcan la música clásica, porque es algo que les puede gustar y entusiasmar". Además, añade que los más pequeños son "más agradecidos", ya que absorben mejor todas las novedades, mientras que los adultos tienen "más prejuicios" a la hora de asimilar cierto tipo de obras.
La clave, según indica, es elegir un tipo de música "alegre, vital, rítmica y con melodía fácilmente reconocible". Pero además, presentarlo con "mucha naturalidad y sin engolamiento", hablándoles no como si fueran tontos, porque si les hablas casi como a adultos "te respetan mucho más", afirma.
