MADRID, 14 May. (EUROPA PRESS) -
Natalia Menéndez se pone al frente de la obra de Miguel Mihura 'Tres sombreros de copa', de la mano del Centro Dramático Nacional, que subirá esta obra anticipo del teatro del absurdo español al Teatro María Guerrero entre le 17 de mayo y el 7 de junio. "Seguirá teniendo vigencia en 2052", ha asegurado la directora.
En este sentido, ha definido la pieza como una apuesta "por el compromiso con la libertad, lo social y lo político, a través del teatro del absurdo español".
"La obra de Mihura es muy importante en la actualidad y tiene una gran vigencia porque por suerte o por desgracia el compromiso forma parte de nuestra vida, esta es una apuesta sobre el compromiso a la libertad, lo social, lo político, es una obra por las minorías que mezcla muchos diferentes temas sociales", ha dicho la también actriz, que ha resaltado que "no es una obra 'facilona'".
Al respecto, ha explicado que 'Tres sombreros de copa' "tiene que ver con la libertad y con el dolor y el llanto, y con la dificultad para encontrar esa libertad". "Más que humor creo que Mihura tiene comicidad, y la crudeza también está en la comicidad", ha agregado.
OBRA DE DEBUT DE SU PADRE, JUANJO MENÉNDEZ
Para la directora la obra cobra "especial importancia" porque con este texto su padre, el actor Juanjo Menéndez, debutó sobre los escenarios en 1952 de la mano de Gustavo Pérez Puig. "Es un texto que conozco muy bien y que ahora me puedo permitir dirigir, porque es una obra que bebe de las vanguardias, de lo popular, hay un compendio de cosas de las que Mihura se burla, por las que seguirá teniendo vigencia en el 2052", ha añadido sobre la pieza que el autor madrileño escribió en 1932 en lo que fue un anticipo al teatro del absurdo. Sin embargo, la pieza se estrenó 20 años después de que Mihura la escribiera.
En la obra, Dionisio, con el sombrero de copa puesto, se queda dormido la noche previa a su boda, y en sus sueños descubre nuevos deseos, miedos y fantasmas en una especie de aventura onírica del mundo de la noche y del 'music hall', que lo hacen dudar sobre si casarse o no.
En esta línea, Menéndez ha indicado que "la libertad, la alegría infantil y la rebeldía del ser humano van de la mano" y que eso se observa en "el momento en el que el protagonista debe enfrentar una decisión difícil".
"Es una apuesta también con respecto a la infancia, porque la alegría que hay en la obra tiene que ver con lo infantil, con jugar, y personajes como Paula (interpretada por Laia Manzanares) o Dionisio (interpretado por Pablo Gómez-Pando) lo demuestran muy bien", ha subrayado.
Para Menéndez el rol de la mujer es "muy importante" porque, por ejemplo, el personaje de Paula quiere jugar, no quiere que la traten como un objeto sexual o que la vean solo como una mujer que se puede besar o tocar, sino como una persona genial y eso es algo que tiene que ver con el ser humano.
En este sentido, ha precisado que no ha versionado la obra sino que ha hecho "pequeñas adaptaciones, que tienen que ver con quitar bromas que en la actualidad no se entienden".
Además, el montaje cuenta con la participación de 18 actores en escena, la escenografía de Alfonso Barajas, la iluminación de Juan Gómez-Cornejo y el vestuario de Mireia Llatge.
"Es una obra con mucha verdad, y con un humor familiar, muy español --ha agregado el actor César Camino, que interpreta al 'cazador astuto', una afirmación con la que se identifica el resto del equipo--. Aquí hay mucho color y elementos que identifican nuestras vidas en la sociedad".
Finalmente, Gómez-Pando ha añadido que se trata de una obra que también habla de las posibilidades, de las opciones, pero desde la verdad, con la que quieren proyectar "mucha alegría, bondad y nobleza".
