MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El madridista Eduardo Hernández-Sonseca lamenta la ausencia de sus compañeros lesionados Venson Hamilton y Ratko Varda, pero confía en que con el trabajo del resto de compañeros, que dará el 125 por ciento, el equipo saldrá adelante y podrá superar el sábado al Tau en un duelo al que no quiero conceder especial trascendencia, pese a que se enfrentan los dos primeros.
"Siempre que juegan primero y segundo se piensa un poco que es una final, pero yo pienso que es sólo un partido más, en el que, el equipo que gane, va a tener una pequeña ventaja a su favor", considera, sabedor de que lo importante será la clasificación final.
De todas formas, el encuentro sí tiene una especial trascendencia, ya que el Tau sólo ha perdido un partido en toda la campaña, mientras que el Real Madrid llega tras ganar al DVK, después de sumar sus dos únicas derrotas, consecutivas.
Las bajas han sido un gran lastre, aunque el madrileño no quiere escudarse en ellas. "Hemos tenido cinco lesiones y cuatro han tenido que pasar por el quirófano. En este sentido, sí nos podemos quejar de la mala suerte que estamos teniendo, pero todos los equipos tienen lesiones, ahora nos ha tocado a nosotros y luego les tocará a otros", dijo.
Por eso, Sonseca confía en que los demás sepan suplir a sus compañeros. "Los demás tenemos que dar el apoyo que daban Venson y Ratko al equipo. Ya que no están, tendremos que dar no el 100%, sino el 125% por cien cada uno para que no se note su ausencia. Debemos luchar por ellos", sentencia.
"PLAZA LO HA HECHO MUY BIEN, TODOS TIENEN MINUTOS".
Además, cree que entre todos podrán superar a los hombres altos del Tau. "Tenemos a Felipe Reyes, Axel Hervelle, quizá Sinanovic (si el técnico decide recuperarle del equipo de la LEB antes de hacer algún fichaje). Me imagino que tampoco a ellos les hará mucha gracia. Creo que por dentro somos peligrosos y la verdad es que creo que nos vamos a pegar dentro de la zona, en el buen sentido de la palabra", consideró.
De hecho, pese a las bajas, el equipo no se ha venido abajo y se mantiene segundo en ACB y se ha colocado líder de su grupo en la ULEB. "Tenemos un banquillo largo y que, ya antes de las lesiones, todo el mundo jugaba, por lo que nadie está falto de ritmo. Los jugadores podemos actuar diez minutos o quince. Eso es lo bueno que tenemos este año porque Joan (Plaza) lo ha hecho muy bien. Todos tienen minutos y así se lleva mejor la falta de algunos jugadores en momentos de la temporada", explicó.
De cara al duelo del sábado, considera que la clave será la "intensidad": "Será un partido entre dos equipos muy físicos, tanto dentro como fuera, y el equipo que físicamente mejor aguante la intensidad del otro en ataque puede llevarse el gato al agua. Es muy raro que un partido como éste tenga un ganador desde el principio. Seguro que se llega al final de forma ajustada y el partido se decide en el último minuto".
"EN EL VESTUARIO NO SE HABLA DE TÍTULOS".
Personalmente, tras recuperarse de una artroscopia expresa que se está "intentando adaptar" y "trabajando como una bestia" para poder estar al "cien por cien" al equipo en busca de títulos en los que aún nadie quiere pensar. "En el vestuario no se habla de títulos, aunque personalmente cada uno haya pensado lo suyo, eso está claro. Pero en el vestuario no. Nosotros somos conscientes de que la temporada es muy larga y que no por acabar líderes o segundos vamos a ganar la Liga", explicó.
"Aquí se juegan 'play-offs', y el octavo, aunque se meta con un triple milagroso en el último segundo, puede ganar la Liga. Somos conscientes de que no siempre gana el mejor equipo, sino el que en mejor momento llega, y nosotros estamos trabajando para eso, para llegar en un momento óptimo de la temporada cuando se decida el título", concluyó.