Un centro del campo de toque de color azulgrana y desborde para codearse con las potencias

MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

La selección española femenina tendrá en el Mundial de Francia una de sus grandes fortalezas en el centro del campo, donde aúna experiencia y juventud y una fidelidad absoluta al fútbol de toque que quiere imponer Jorge Vilda para codearse con las potencias.

La presencia del FC Barcelona en esta zona, con cuatro jugadores (Vicky Losada, Alexia Putellas, Patricia Guijarro y Aitana Bonmatí) y una que se crió allí (Virginia Torrecilla), aumenta esa filosofía por tratar bien el esférico, a lo que se añade el desparpajo de Amanda Sampedro y Alexia Putellas. Conocemos un poco más a las centrocampistas del combinado nacional.

1. Vicky Losada. La de Terrassa, de 28 años y 64 veces internacional, es otra de las veteranas del combinado nacional, donde gracias a sus calidad es una de sus piezas claves, al igual que en el FC Barcelona, equipo del que se marchó joven para buscar más profesionalismo fuera. Jugó en los Estados Unidos y en Inglaterra, en el Arsenal, equipo en el que militaba cuando jugó el Mundial de Canadá de 2015 donde entró a formar parte de la historia del fútbol femenino español al anotar el primer gol en una cita de este calibre.

2. Amanda Sampedro. La madrileña, de 25 años y 48 veces internacional, es otra de las capitanas del vestuario. Fija en el Atlético de Madrid y en la selección, la vallecana dio el salto muy pronto a la Absoluta, tras haber sido indiscutible en las categorías inferiores, donde fue campeona de Europa Sub-17, bronce mundial Sub-17 y subcampeona de Europa Sub-19. Amanda, de sangre colchonera y que tiene como uno de sus ídolos a Fernando Torres, ya estuvo en el Mundial de Canadá y aportará su atrevimiento por la banda.

3. Silvia Meseguer. La aragonesa es la más veterana de las 23 elegidas y jugará su segundo Mundial a sus 30 años, con el mérito añadido de haber tenido que dejar de acudir a las convocatorias para poder sacarse la carrera de Medicina, algo que no impidió que Jorge Vilda siguiese contando con ella cuando volvió a estar disponible, muestra de su calidad. La centrocampista del Atlético atesora 66 internacionalidades desde que debutase en el año 2008.

4. Alexia Putellas. La barcelonesa, pese a su juventud (25 años), es otra de los 'pesos pesados' del vestuario con sus 67 internacionalidades. Titular indiscutible en el FC Barcelona y en la selección, la catalana, que ya vivió la experiencia de 2015, despuntó desde muy joven y forma parte de la misma generación que Amanda Sampedro, aunque ella también ganó un título continental más Sub-17 en 2011. Destaca por ser una de las mejores goleadoras del equipo, con 16 tantos este año en la Liga Iberdrola, y es una de las jugadoras de más talento y desborde.

5. Virginia Torrecilla. La balear, de 24 años, acumula ya 58 internacionalidades pese a su juventud. También estuvo hace cuatro años en Canadá, donde ya fue capaz de hacerse un hueco en el centro del campo y jugar ante Brasil y Corea del Sur, cuando ya había anunciado que dejaba el FC Barcelona para iniciar una aventura y crecer en el fútbol francés en el Montpellier, club en el que ha estado hasta esta temporada. Una mediocentro que aporta equilibrio.

6. Patricia Guijarro. La balear, de 21 años, va quemando etapas a toda velocidad y ya se ha convertido casi indiscutible para Vilda pese a su edad, con 19 internacionalidades y participando en toda la fase de clasificación para este Mundial. El seleccionador incluso esperó que se recuperase de la lesión que la tuvo sin jugar desde enero hasta mayo, sabedor de lo que le puede aportar una centrocampista 'total' y con gol que ya fue 'Balón de Oro' y 'Bota de Oro' en el pasado Mundial Sub-20 donde España se proclamó subcampeona. Un gol suyo en el tiempo de descuento dio el título europeo Sub-19 en 2017.

7. Aitana Bonmatí. La barcelonesa, de 21 años, es la más inexperta del combinado nacional en el centro del campo, con tan sólo 12 internacionalidades. Compañera de Patricia Guijarro en los éxitos de las categorías inferiores, donde también era indiscutible, dejó la imagen de su llanto tras las semifinales del Mundial Sub-20 por haber sido expulsada y no poder jugar la final. La exquisita jugadora de San Pedro de Ribas es otra de las llamadas a coger la batuta y tiene la confianza plena de Jorge Vilda.