SAO PAULO (BRASIL), 2 Jun. (Reuters/EP) -
La FIFA supervisó este domingo el evento final de prueba en el estadio Arena Corinthians y apuntó que todavía queda por delante "una semana y media de trabajo duro" para que esté listo para el partido inicial del Mundial de fútbol de Brasil, el 12 de junio.
Unos 37.000 aficionados vieron el empate del Corinthians por 1-1 con el Botafogo, muchos menos que la capacidad de 68.000 prevista para el encuentro de Brasil contra Croacia que dará comienzo al torneo.
Algunas partes todavía no fueron probadas con gente adentro y otras deberán ser ajustadas en los próximos días, indicó Tiago Paes, el gerente de operaciones del comité organizador local. "Se hará mucho para cambiar la forma en que luce el estadio", advirtió.
"Son ajustes a las estructuras temporarias, la instalación de internet, la finalización de los palcos ejecutivos, colocar sofás, refrigeradores, plantas. Todo mejorará, no tengo dudas", aclaró el directivo.
El partido del domingo se jugó sin ningún incidente, pero la vigilancia lenta fuera del terreno de juego hizo que cientos de aficionados se perdieran el inicio del partido, y la señal de internet era errática, mientras que el transporte hacia el estadio fue rápido y sin tensiones.
Si bien algunos sectores estaban vacíos, los aficionados y los responsables parecían contentos. "El estadio está muy lindo, necesita algunos ajustes más pero está más listo que en el primer partido", aseguró Mano Menezes, el extécnico de Brasil que ahora dirige al Corinthians.
Andalucía
