Así ha sido el camino del Betis hacia su quinta final de Copa

MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

Después de 17 años, el Real Betis vuelve a una final de Copa. Fue en 2005 cuando venció, en un Vicente Calderón abarrotado, a Osasuna en la prórroga (2-1). Y en su camino hasta alcanzar de nuevo la ronda final del torneo del KO, los verdiblancos han tenido que batir a rivales de peso y otros que han sido huesos duros de roer.

Desde que comenzase su andadura en la Copa del Rey el 1 de diciembre, el Betis ha superado seis eliminatorias para llegar a la final de La Cartuja de este sábado (22.00 horas) cinco meses después. Siete partidos en los que se han visto muchas caras del equipo bético, que además ha pasado por diferentes circunstancias, la más extraordinaria el aplazamiento del derbi ante el Sevilla por el lanzamiento del palo sobre Joan Jordán.

El primer escollo, más que asequible, que tuvieron que superar los de Manuel Pellegrini fue el Alicante en primera ronda. Como estaba previsto, el conjunto andaluz fue muy superior en el estadio de El Collao de Alcoy, goleando al equipo local (0-4) con tantos de Tello, Lainez, Joaquín y Bartra para tumbar un primer obstáculo de manera cómoda.

Más sufrida fue la segunda ronda ante el Talavera. Con un Estadio Municipal de El Prado a reventar, el equipo local plantó cara a los béticos, que no pudieron certificar su pase a dieciseisavos de final hasta la segunda parte de la prórroga (2-4). Los de Pellegrini tuvieron que remontar un tempranero gol de penalti de los locales, que vieron como su plan se iba cumpliendo en tiempo y forma.

Pero no contaban con un Borja Iglesias enchufadísimo, que logró igualar el marcador minutos después. Ya en la segunda mitad, Joaquín adelantó a los béticos poniendo el 1-2. Pero casi con el partido cumplido, en el minuto 89, los talaveranos forzaron la prórroga llevando la locura a El Prado. Ya en el tiempo extra, el físico y el esfuerzo hicieron que la balanza se decantara del lado bético, gracias a los goles de Lainez y Canales que cerraron el 2-4 definitivo.

Tras dos rivales de Preferente y Primera RFEF, en dieciseisavos se enfrentó al Valladolid, y en el José Zorrilla presentó su seria candidatura al título con un 0-3 contundente. Prueba fue el once elegido por el 'Ingeniero', sin reservar jugadores y dándole mucha importancia a una competición en la que demostraron que iban enserio. Un tremendo lanzamiento de falta de Fekir y el tanto de Carvalho antes del descanso dejaba sentenciada la eliminatoria, con el gol de Borja Iglesias como guinda para volar a los octavos de final.

En la siguiente ronda, el sorteo deparó un derbi sevillano, que estaría marcado por la polémica más que por el fútbol. Tras los goles de Papu Gómez y el empate de Fekir de saque de esquina directo, el partido fue suspendido por el árbitro, después de que un aficionado local lanzara un palo de PVC al centrocampista sevillista Joan Jordán. El encuentro se reanudó el día siguiente, sin público en el Villamarín.

Y los verdiblancos volvieron a ganar la batalla al Sevilla en El Gran Derbi, gracias a un gol de Canales que puso el 2-1 definitivo en el minuto 73. Un triunfo que permitía a los béticos seguir avanzando en su andadura, llenos de confianza y seguridad tras batir a su gran rival.

Apenas dos semanas después llegaron los cuartos ante la Real Sociedad, que ya avisó al Betis eliminando al Atlético de Madrid en octavos. Pero los de Pellegrini fueron una apisonadora y conquistaron el Reale Arena con un tajante 0-4. En un momento clave para el equipo, la plantilla volvió a mostrar su mejor versión para dar un golpe sobre la mesa y acabar con las dudas que rodearon a los verdiblancos antes del encuentro. Juanmi completó un doblete y Willian José y Ruibal cerraron la goleada.

La final casi 20 años después estaba más cerca y el último inconveniente era un Rayo Vallecano que estaba haciendo historia y pisaba las semifinales por primera vez. Pero los béticos no fallaron y conquistaron Vallecas con una valiosa victoria (1-2) que dejaba encarrilada la eliminatoria a doble partido.

Pero el Betis sufrió en la vuelta en el Villamarín. Bebé igualó la eliminatoria, ya que no valía ya el doble valor de los goles a domicilio, con un potente lanzamiento de falta, y hacía soñar a los franjirrojos con al menos una prórroga que se les escapó por un gol de Borja Iglesias en el añadido. Así, todo el beticismo alcanzó el éxtasis, conscientes de que volverían a luchar por un gran título tras 17 años.