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MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El futbolista del Villarreal Rubén Gracia 'Cani', que afronta la recta final de la lesión de rodilla que le ha dejado más de dos meses sin poder jugar, aseguró que está "contento" de volver a "entrenar" con "normalidad" y "sin molestias", pero reconoció que aún tiene "algo de miedo".
"Estoy entrenando con normalidad y ya llevo varios días sin molestias, pero sigo teniendo algo de miedo. Estoy contento, pero la recuperación debe ir de forma progresiva y hay que esperar. Me gustaría estar ya recuperado, al cien por cien y sin ningún problema, pero por ahora no puede ser", declaró el jugador maño en rueda de prensa.
El centrocampista admitió que "la lesión no está olvidada", puesto que "todavía" está en su "cabeza", pero se mostró optimista. "Se puede decir que estoy en el camino. Estoy contento porque va mejor, estoy viendo la luz", reconoció.
No obstante, Cani comentó que está pasando por uno de los momentos más "duros" y "complicados". "Ha sido una de las peores lesiones que he tenido y, sobre todo, era complicado por la incertidumbre, ya que no sabía cuándo se podía acabar de verdad", afirmó.
El aragonés, además, habló resignado de lo inoportuno de la lesión. "Es verdad que en momentos buenos y cuando estaba en una buena línea, ha llegado un parón inesperado, ya sea por una lesión o porque me dejaba el técnico fuera del equipo. Es algo que puede suceder, son piedras en el camino que hay que superar y esta vez ha sido una lesión que nunca había tenido", indicó.
El futbolista del 'submarino amarillo' desechó, de momento, la opción de someterse a una operación. "Si sigo la evolución buena como ahora, el quirófano estaría descartado. Pero es algo que ha estado ahí y que me ha tenido muy preocupado, por lo que ahora estoy más tranquilo. Si no pasa nada raro, o no recaigo, pues podremos descartarlo, así que confiemos en ello", comentó.
Por último, Cani no perdió la oportunidad de criticar el lanzamiento de un bote de gas lacrimógeno en El Madrigal durante el pasado Villarreal-Celta. "Estamos sorprendidos con todo lo que ha ocurrido, es algo que nadie pensaba que podía suceder aquí en nuestro campo. Estaría bien que detuvieran al que lo ha hecho, una cosa de estas no puede pasar sin castigo", concluyó.
