GRANADA, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Granada, Fabriciano González, Fabri, ha comentado este lunes a Europa Press que queda muy poco margen temporal para poder jugar los minutos que restan por disputarse del encuentro contra el Mallorca suspendido este domingo tras el "incidente lamentable", acaecido cuando un menor lanzó parte de un paraguas contra uno de los árbitros asistentes del choque.
Como se recordará, el hecho ocurrió en el minuto 60 del encuentro y llevó al colegiado Clos Gómez a suspender el mismo, en un momento en el que los nazaríes ganaban por 2-1 tras remontar en el marcador al tanto inicial del Mallorca.
"Es un incidente lamentable que no he vuelto a revivir. Se ha localizado a la persona que lo ha hecho, que es un chavalín y creo que ha sido una cuestión de mala suerte, tal y como iba el partido tras la remontada", precisó.
Así, Fabri puso de relieve la escasez de fechas que hay para jugar esos minutos que restan ante los baleares. "No se qué determinaciones se tomarán porque no me ha dado tiempo para pensar todavía en ello. Acabo de entrenar con el equipo y no tengo unas bases para analizar, sé que tenemos, en muy poco tiempo hasta Navidades, un montón de partidos, incluidos de dos de Copa contra la Real y no sé si hay una semana o dos para jugar estos minutos. No sé lo que marca la ley, ni dónde ni como", indicó.
Paralelamente, expresó su deseo de que el feudo rojiblanco sea siempre un fortín para el Granada, aunque, en todo momento, desde el máximo respeto.
"Lo que le pido siempre a la gente es que recuerde que el Granada llevaba 35 años sin estar en Primera y es mucho tiempo. Somos un equipo modesto, y dentro de eso, de la humildad y el respeto por los árbitros y por todo el estamento futbolístico --manifestó a Europa Press--, lo que pido es que Los Cármenes nos ayude y que sea siempre una olla a presión, como el Reyno de Navarra, el Molinón u otros campos. Pero siempre desde el respeto y la humildad, siempre desde el lado bueno", insistió.
El preparador granadinista cree que lo sucedido ha sido un hecho fruto de la mala fortuna. "Ha sido un acto de verdadera mala suerte en todos los sentidos, porque el pobre chaval tenía el mango en la mano, parece ser que se le soltó sin querer. El club ha cumplido todas las normativas al respecto, no ha sido nadie que haya entrado ilegalmente al campo o con objetos ilegales", explicó.
Por último, no ocultó la contrariedad con la que la plantilla del Granada ha vivido lo ocurrido. "Estábamos ayer un poco disgustados, porque estás en el momento justo de la fuerza, has remontado, estás lleno de fuerza porque has remontado y posiblemente, con todos mis respetos hacia el Mallorca, más cerca de conseguir el tercer gol. Sabemos lo que nos cuesta ganar y la gente en el vestuario estaba un poco dolida, porque después del esfuerzo que no podamos finalizar por un detalle como éste ...", concluyó.
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