VALENCIA 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
El delantero Salva Ballesta ha salido hoy, tras caer el Levante a puestos de descenso por su derrota en el Vicente Calderón, para pedir una actitud positiva al entorno azulgrana y subrayar que este momento no es "para echar balones fuera" ni para que los granotas "escondan la cabeza".
"A nadie le gusta verse en descenso, es una situación difícil, pero es momento de trabajar con serenidad y confianza", dijo Salva, quien aseguró que el equipo valenciano afronta cada partido "con intensidad, ilusión y mucha profesionalidad", aunque reconoció sus limitaciones. "Trabajamos mucho en función del rival, vamos detrás del balón, pero es que somos un equipo humilde", explicó.
El aragonés reiteró que deben estar unidos. "No es momento para echarse la caca el uno al otro. Hay que asumir las críticas que vengan, pero creo que un equipo puede recibir críticas cuando se ve pasotismo y en el Levante no ocurre esto", recalcó. "No estamos siendo peor que ningún rival, fallamos en jugadas puntuales y del tanto de Torres fue un golazo", aseguró.
El punta indicó que él siempre piensa "en positivo" y eso le hace ver que "quedan muchos puntos y los rivales tienen calendarios difíciles", por lo que los valencianos van a "pelar hasta el final sin hundirse" confesando que estar en descenso es "para alarmarse", aunque cree que, hasta el final de Liga, "habrá subidas y bajadas de equipos" y el Levante puede salir "ganando dos partidos seguidos".
Por otro lado, el atacante afirmó que a los granotas les falta gol, pero no cree que sea cuestión de puntería. "Cuando el equipo no gana y todo va mal los tiros vienen normalmente por el mismo lado, pero no somos un equipo que los de arriba recibamos muchos balones", explicó.
"No llegamos mucho por fuera, los remates no son muy claros y son jugadas muy peleadas. A lo mejor nos falta presencia en el área, pero hay que asumirlo. Quien esté convencido bien y el que no, no sirve para estar en un equipo así", añadió.
"CONTENTO Y SUPERMOTIVADO".
El delantero azulgrana aseguró que está "contento y supermotivado" por su rendimiento, pese a que sólo ha logrado anotar tres goles desde que llegó al Levante. "Me gustaría tener más balones dentro del área y cinco o seis remates por parte, pero si no puede ser así por lo que sea hay que seguir trabajando", sentenció.
El maño piensa que el factor psicológico será importante de ahora en adelante. "Habrá gente más fuerte mentalmente, que haya que animarle más y yo me considero un tío fuerte y en la medida que pueda intentaré ayudar al que esté decaído", manifestó.
"Tenemos que ayudarnos los compañeros en el vestuario, que los técnicos den esa motivación, esto es un bloque y hasta el final, mientras haya posibilidades, vamos a estar luchando. La situación es difícil, pero no catastrófica porque estamos a un punto de volver a salir", agregó.
Por último, negó que la plantilla esté molesta porque Abel Resino se quedara en Madrid con permiso del club tras una derrota. "Tendrá cosas que hacer, otras veces somos los jugadores los que pedimos libre. Si el partido hubiera sido en Sevilla, yo hubiera aprovechado para arreglar cosas", subrayó.
"Si me dicen que, por no estar el lunes, van a variar las cosas, no es así. Hay varios técnicos capacitados para dirigir una sesión y los jugadores tenemos que darles importancia y los galones", finalizó.