BILBAO, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un temporal de lluvia y frío aguarda mañana al Sevilla en Bilbao, donde el conjunto hispalense se jugará con el Athletic Club el pase a la final de la Copa del Rey en San Mamés (20:00 horas).
El equipo que dirige Manolo Jiménez no sólo tendrá que aguantar la presión de 40.000 gargantas rojiblancas, sino que además deberá hacer frente a las inclemencias del tiempo, tal y como informó hoy el Departamento de Interior del Gobierno Vasco, que alertó de la llegada de un temporal de viento y agua en el mar, de lluvia y una cota de nieve que descenderá hasta los 600 metros a partir de mañana.
Según los pronósticos, mañana se esperan "precipitaciones moderadas y generalizadas". "Al final del día se esperan tormentas con granizo en la vertiente cantábrica. En cuanto a la cota de nieve, mañana rondará los 800-900 metros al mediodía y bajará hasta los 600-800 metros a últimas horas", dijo.
El Athletic recibirá al Sevilla con lluvia, igual que ocurrió en la ida de la semifinal en la capital hispalense. Por lo tanto, San Mamés será mañana terreno abonado para un fútbol directo, físico y de fuerza que, a priori, puede favorecer al Athletic o, al menos, no beneficiar al Sevilla. No hay más que recordar que en el partido de hace un mes, la genialidad de Jesús Navas pasó desapercibida durante los primeros 45 minutos del choque porque su velocidad pierde muchos enteros sobre mojado.
