NUEVA YORK, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La atleta rusa Yelena Isinbayeva, en salto de pértiga, el keniata Bernard Lagat, en la prueba de la milla, y la etíope Tirunesh Dibaba, en los 3.000 metros, no fallaron y se impusieron en sus respectivas categorías para grabar su nombre en la edición centenaria de los míticos Millrose Games, disputados en el Madison Square Garden de Nueva York.
Isinbayeva, campeona olímpica y del mundo en salto con pértiga, no tuvo problemas para llevarse la victoria en la que era su primera participación en la legendaria cita atlética, pero no pudo batir el que hubiese sido su decimoctavo record del mundo.
Con un salto de 4,82 metros, que superó con holgura el récord del campeonato que ostentaba Stacy Dragila con diez centímetros menos, la soviética superó a la estadounidense Jenn Stucyzinski (4,53) y a las brasileñas April Steiner y Fabiana Murer con la misma marca.
Por su parte, el keniata Bernard Lagat superó, no sin dificultad, al australiano Craig Mottram para imponerse en la milla sobre las endemoniadas curvas de la pista con cuatro calles del Madison Square Garden.
El doble medallista olímpico de los 1.500 metros tuvo que emplearse a fondo para superar en los últimos metros al australiano con un tiempo final de 3:54.26. La tercera plaza fue para el estadounidense Chris Lukezic con 4:01.48.
Tampoco hubo sorpresas en la prueba de los 3.000 femeninos, en la que la etíope Tirunesh Dibaba, que el pasado fin de semana batió el record de los 5.000 en pista cubierta, se deshizo de la estadounidense Sarah Hall en los últimos 200 metros para ganar con un crono final de 8 minutos, 46.58 segundos.
LOS AÑOS NO PASAN PARA DEVERS.
Por otro lado, una de las grandes protagonistas de esta centenaria edición de los Millrose Games, la estadounidense Gail Devers, demostró estar en plena forma a sus 40 años y, 19 meses después de dar a luz, ganó en la prueba de los 60 metros vallas por delante de su compatriota Joanna Hayes. Devers sumó así su cuarta victoria en la prueba neoyorquina, 15 años después de que lograra la primera en 1992.
Otra estrella de la década de los 90, Maurice Greene, tuvo peor suerte. El ex dueño del título mundial de los 100 metros, quien descansó el año pasado debido a una serie de lesiones, corrió solamente 25 de los 60 metros de la prueba masculina antes de desplomarse al suelo en una carrera en la que el ganador fue Shawn Crawford con 6,56 segundos.
