MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El piloto francés Stéphane Peterhansel (Mini) declaró este jueves que la nueva edición del Dakar, que se disputa del 5 al 18 de enero de 2014 con un recorrido que cruzará Argentina, Bolivia y Chile, es "la más difícil y dura" desde que llegaran a Sudamérica hace cinco años, lo que les hace volver al "espíritu del Dakar africano".
"Sin lugar a dudas, desde que llegamos a Sudamérica todos las ediciones han sido distintas, pero la de este año va ser la más dura y difícil de todas. Por ello, parece que volvemos al espíritu del Dakar africano", afirmó durante la puesta de largo en Madrid del equipo X-Raid con motivo del inicio en enero de la trigesimosexta edición del famoso rally.
El francés, que volverá a subirse a un Mini All4 Racing, correrá por vigesimoquinta vez el Dakar, lo que hace que esta edición sea "realmente especial". "Sigo muy motivado, nada ha cambiado. Estoy deseando que empiece, estaré centrado en mi objetivo que no es otro que ganar", apuntó.
"El coche es el mejor para esta competición, así que estamos preparados para la dureza que nos espera. El Dakar de este año es el más difícil, pero es algo que nos beneficia, porque una de nuestras características es la durabilidad que tenemos. Una etapa difícil no nos supone mucha dificultad", explicó.
El piloto, que corrió en veinte ocasiones en África, reconoce que es algo que echa de menos, aunque no ve factible que a corto plazo se pueda regresar. "Sudamérica nos ha recibido con los brazos abiertos. Allí nos encontramos con distintas pistas, de 300 ó 400 kilómetros, donde la conducción técnica pasa a ser lo más importante. Estoy preparado para Sudamérica después de 20 años en África", comentó.
"LA LLAVE DEL ÉXITO DEL DAKAR ES LA EXPERIENCIA".
Asimismo, admitió que la llave del éxito del Dakar es "la experiencia", algo que tiene después de tantos años y que le ha hecho mejorar. Precisamente, esa experiencia es la que le hace ser "algo superior" a su compañero de equipo, Nani Roma. "Sé que es mi principal rival", reconoció.
"Es muy bueno. Tiene muchas posibilidades de ganar el Dakar. Si yo no puedo ganar, me encantaría que pudiera ganar él. Nos conocemos desde hace 15 años, hemos compartido muchos momentos. Es un piloto muy rápido y me encanta compartir equipo con él", admitió.
Por último, acerca de una de las novedades más importantes que presenta esta nueva edición, en la cual parte del circuito será distinto para motos y para coches, el francés indicó que para él era algo "frustrante", ya que la parte del recorrido que pasa por Bolivia es exclusivamente para las motos. "Será difícil para la navegación porque no podremos seguir su estela, algo que hasta ahora nos ayudaba", concluyó.
