JJ.OO/Atletismo.- Eliseo Martín: "He estado muy cerca, pero me ha faltado un punto más"

Actualizado: sábado, 16 agosto 2008 9:26

Los tres representantes españoles del 3.000 obstáculos eliminados en las series

PEKÍN, 16 Ago. (del Enviado Especial de EUROPA PRESS, Gaspar Díez) -

Eliseo Martín, el mejor de los tres españoles que fueron eliminados en las series de los 3.000 obstáculos, lamentó no disputar la final olímpica de los Juegos de Pekín, pues, según él, se vio perjudicado porque su serie salió muy lenta y afirmó que, con las continuas nacionalizaciones, cada vez es más complicado poder competir con el poderío de los atletas africanos.

"Si mi serie hubiera salido un poco más a ritmo, pues hasta el 2.000 hemos ido lento, podía haber pasado. La segunda serie ha sido perfecta, a ritmo desde el principio. Ha ido muy regular, con el americano tirando todo el tiempo y eso ha hecho que fueran por debajo de 8:20 bien", explicó Eliseo, bronce en el Mundial de París de 2003, y sexto y noveno en los Juegos de Sydney y Atenas, respectivamente.

Martín, que aún así hizo su mejor marca de la temporada, con 8 minutos, 23 segundos y 19 centésimas, dijo que hizo "una relativa buena carrera". "Pero me ha faltado un punto más y, con los cuatro africanos que iban delante, era complicado meterse. He estado muy cerca, pero ahora estoy decepcionado porque estoy acostumbrado a luchar en la final con los mejores y no poder estar ahí duele bastante. Están demostrando que su genética es diferente y que aunque entrenemos no es suficiente para estar a su altura", manifestó.

El atleta de Monzón subrayó que la prueba de los 3.000 obstáculos "cada vez se endurece más" porque hay más nacionalizaciones y algunos países africanos están potenciándola. "Si antiguamente era difícil meterse en el podio con los keniatas, ahora hay doce africanos en la final. Aquel año teníamos cuatro keniatas y dos de Qatar y había que estar a tope y conseguí una medalla que va a ser muy complicada de repetir para cualquier atleta blanco", evocó respecto al tercer puesto en el Mundial de París.

BLANCO: "CADA OBSTÁCULO ERA UN MURO".

José Luis Blanco, lesionado en el pubis, se tocaba la cara y apuntaba con el dedo al esloveno Bostjan Buc en los pasillos vallados de la zona mixta. 'Tienes mucha cara, sí tú, tienes mucha cara', le recriminaba al balcánico. Buc le había propinado un codazo que mandó a Blanco a la hierba, lo que le obligó a saltar incluso unos cables de electricidad antes de recuperar su sitio en el tartán.

"Lo primero que he pensado es que me iban a descalificar como el año pasado. Me he ido fuera", se quejó Blanco, descalificado el pasado año en el Campeonato del Mundo de Osaka (Japón), aunque no quiso usar ese pretexto para justificar su mal tiempo en la serie, pues sus problemas vienen de largo, unas molestias en el pubis de la pierna derecha que le tensaban el músculo en exceso en cada salto de obstáculo.

Blanco se infiltró el jueves y y no iba durante la carrera. Lo notaba cada vez que tenía que superar las vallas. "He saltado la ría con la pierna mala, una cosa que no he hecho en mi vida. y ya he empezado a notar tensión y no iba. Me costaba saltar la ría. Igual me tenía que haber infiltrado antes. Desde el kilómetro uno y medio iba muy incómodo. Había entrado en todas las finales de los campeonatos importantes y en ésta, aunque no había entrenado bien, también quería hacerlo", indicó.

El corredor de Lloret de Mar, que tendrá que pensar cuándo se opera y pensar ya en el Mundial del próximo año, confesó que cuando más corría más le tiraba de la pierna enferma. "Cada obstáculo era un muro. No era un ritmo malo, pero si hubiera estado bien me habría ido perfecto. Iba relativamente cómodo, pero cada vez que saltaba, más tensión. Cuando salto llego al final, pero hoy tengo las dos zapatillas empapadas", dijo mostrándolas a los periodistas.

En los días previos se le había visto a Blanco trotar cerca del centro de prensa de los Juegos (MPC) a temprana hora para impulsar menos su pierna mala, para traccionarla en menor medida de que lo hacía sobre el césped de la Villa de Deportistas.

"El ritmo en Pekín ha sido duro por toda la recuperación. Nosotros no podemos correr nunca por asfalto porque es malo para las articulaciones. Pero al correr por la hierba tengo que traccionar más y eso me molestaba", justificó Blanco, quien casi todos los días cogía sus zapatillas secas y se iba al Estadio Nacional por el asfalto, junto a los coches de la gran avenida que circunda al Anillo Olímpico.