JJ.OO/Atletismo.- Naroa Agirre: "Con pasar a la final me daría con un canto en los dientes"

Actualizado: jueves, 14 agosto 2008 16:07

PEKÍN, 14 Ago. (EUROPA PRESS) -

La pertiguista Naroa Agirre, que afrontará sus segundos Juegos Olímpicos tras el sexto puesto logrado en Atenas hace cuatro años, explicó que se daría por satisfecha "con pasar a la final y estar entre las 12 mejores del mundo", aunque también afirmó que estaría "contenta" si consigue "superar la mejor marca de este año", con el listón situado a 4,40.

"Sobre todo quiero salir contenta, que no me moleste la espalda y estar tranquila en la competición. Me gustaría salir de la pista pensando en que lo he dado todo. Y en cuanto a resultados me gustaría meterme en la final entre las 12 mejores", aseguró la deportista en una entrevista a Europa Press.

Y es que "no está siendo un año fácil" para la atleta donostiarra ya que los entrenamientos realizados en invierno con Vitaly Petrov, preparador de la plusmarquista Yelena Isinbayeva y del ex campeón Sergei Bubka, le están haciendo cambiar su técnica de salto para buscar mejores marcas, algo a lo que se está "habituando".

"Son cambios de estilo de técnica. Cada uno salta a su forma, con su técnica propia, que sí los rusos, los americanos, ... pero nosotros acudimos donde Petrov, porque creo que es el tiene la mejor técnica. Si a Isinbayeva, que es la mejor del mundo, le ha costado dos años adaptarse ... yo no voy a ser menos", explicó la pertiguista.

Por ello, la actual campeona de España y plusmarquista nacional de la disciplina, intentará superar el 4,40 de este año, misma marca con la que consiguió el sexto puesto en Atenas, pero que no le sería suficiente, a priori, ni para entrar en la final en Pekín porque "las cosas han cambiado mucho de hace cuatro años" ya que "entonces era una prueba bastante nueva, pero ahora las marcas han evolucionado mucho". Por este motivo, Agirre pronostica que con 4,40 "no se va a pasar ni a la final".

A pesar de todo, la donostiarra es consciente de que sus mejores marcas "suelen darse en las competiciones importantes", algo que la "anima", aunque en esta ocasión tendrá el 'handicap' de que su entrenador no va a poder estar presente en la pista del estadio porque, según explica la guipuzcoana, "los organizadores han decidido que los que vayan fuera de la expedición del equipo no tengan acreditación, y encontrar una entrada está imposible, por lo que no va a poder viajar", lo que la perjudica.

"Soy una atleta que dependo mucho de mi entrenador. Después de cada salto confió en él totalmente, y es él el que me dice lo que debo o no debo hacer. En competición no suelo pensar demasiado y actúo como una marioneta. Eso es lo más fácil para mí, pero bueno, tendré que cambiar esa técnica y habituarme a lo nuevo", apuntó a Europa Press.

Sin embargo, sea cual sea su participación en Pekín, es consciente de que simplemente el hecho de poder participar en unos Juegos Olímpicos "es lo más grande que hay para un deportista y ya el hecho de ser parte de ellos hace mucha ilusión y eso algo de lo que sentirse muy orgullosa".

Pero reconoce que el hecho de participar es una circunstancia que valorará "más adelante", ya que "cuando tienes más opciones y conoces la Olimpiada" hay que exigirse "algo más". Aunque dentro de unos años vea el "éxito que supone participar en unos Juegos Olímpicos, a día de hoy conformarse con participar no basta", advirtió.

En cuanto a la competición en general, Naroa Agirre no tiene dudas de que Yelena Isinbayeva reeditará su título de Atenas sin demasiadas complicaciones ya que la actual campeona europea, olímpica y mundial demostró su estado de forma recientemente, tras poner el récord del mundo en 5,04 metros hace menos de un mes.

"En cuanto a mis rivales, yo creo que lo son todas las que tienen mejor marca que yo, que son bastantes. Va a depender de la marca de calificación que pongan, o si no de la repesca. Al final dependo de mí misma para pasar a la final. Si estoy sobre mis mejores marcas hay opciones de estar en la final, pero si no es así, no habrá ninguna opción", explicó.

La deportista donostiarra, a sus 29 años, no será una novata en la competición de Pekín, ya que hace cuatro años en Atenas consiguió clasificarse en sexta posición y llevarse el diploma olímpico, lo que hizo que el recuerdo que le quedó de la cita griega sea "insuperable".

"Los Juegos de del 2004 en Atenas me impresionaron para bien, aunque yo también estaba dentro de mi euforia porque todo me había ido muy bien y veía todo bonito. El recuerdo con el que me quedaré de Pekín dependerá mucho de cómo sea mi actuación y si quedo satisfecha o no", concluyó.