JJ.OO.- La mayoría de las entradas para los Juegos de Pekín se quedan sin vender pese al gran número de peticiones

Actualizado: lunes, 28 enero 2008 12:46


PEKÍN, 28 Ene. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Débora Altit) -

El 75 por ciento de las entradas que el Comité Olímpico Organizador de los Juegos de Pekín 2008 (BOCOG, en sus siglas en inglés) puso a la venta en diciembre pasado entre ciudadanos chinos no han podido ser repartidas pese al enorme número de peticiones porque todos querían hacerse con un sitio para los mismos eventos, según informa hoy la prensa nacional.

El BOCOG organizó hace mes y medio su segunda "segunda fase" de ventas por sorteo tras la sobrecarga de peticiones y el consecuente caos informático que le obligó a detener la operación en otoño y acabó con el despido del responsable del centro de ventas.

El comité decidió volver al sistema de reservas y sorteo puesto en marcha en la primera fase, en lugar del de venta directa, pero sólo ha colocado 450.000 de los 1,8 millones de entradas ofrecidas, y eso a pesar de haber recibido peticiones para el equivalente a 4,2 millones de localidades.

Desde el centro entradas se había ya comentado que la demanda había sido "extremadamente alta, pero demasiado centralizada en unos cuantos actos importantes", según informa hoy la agencia oficial 'Xinhua'. El BOCOG había incluido en este sorteo plazas para la inauguración y clausura de los Juegos, algo que no hizo en la primera fase de las ventas.

Así las cosas, de los alrededor de siete millones de tickets que se calculan disponibles para los que prometen ser los Juegos más grandiosos de la Historia del Olimpismo, todavía están sin dueño cerca de cinco millones, ya que en la primera ronda se repartieron 1,6 millones.

China ha decidido convertir estos Juegos en las Olimpiadas del pueblo, por lo que más de la mitad de las entradas irán a parar a ciudadanos chinos por un precio económico.

De momento, y a falta de poco más de seis meses, la mayoría de las entradas que han podido ser adquiridas por ciudadanos extranjeros, excluyendo a los residentes en el país asiático (que sí podían entrar en el sorteo) provienen del suculento negocio de reventa que ya se ha puesto en marcha, y en el que se pueden adquirir entradas por cerca de 1.500 euros, como las de la ceremonia de inauguración, que en realidad cuestan menos de 50.