PARÍS, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El tenista serbio Novak Djokovic se mostró "feliz" tras conquistar en tres sets el Masters 1000 de París en una reñida final frente a Gael Monfils, tras reconocer que fue un encuentro "tremendamente complicado" debido a la "presión" del público francés y a la intensidad de Monfils.
"El apoyo incondicional de la grada le ha otorgado a Monfils mucha motivación y energías para luchar hasta el final. He tenido que luchar contra él y contra la constante presión de la grada, aunque yo he controlado mis nervios y al final han salido todas mis emociones.", reconoció el serbio.
Las cuatro finales perdidas este año fue un hecho que le afectó anímicamente. "Perder cuatro finales te afecta a la cabeza. Pensar en ello no es una cuestión agradable, aunque se me ha pasado por la mente cuando Monfils ha cogido el ritmo del encuentro", afirmó Djokovic.
Sin embargo, este torneo supone el segundo consecutivo que consigue tras su reciente victoria en el ATP 500 de Basilea, lo que viene a demostrar que ahora mismo es el tenista más en forma del circuito ATP, donde se sitúa en tercera posición, a pocos puntos de Rafael Nadal.
"Conseguir dos títulos seguidos es un gran logro para mí y más tras las derrotas de los dos primeros del mundo. Estoy muy contento con mi juego en las últimas cincos semanas. El ganar dos títulos consecutivos por primera o segunda vez en mi carrera me motiva mucho de cara al futuro", se sinceró.
Precisamente, el reciente ganador en parís, ya piensa en el futuro y confiesa que va "con una gran confianza a Londres", donde se disputará la cita de 'maestros' y donde defenderá título. "Lo único que me preocupa es si voy a estar físicamente bien y con energías para afrontar ese torneo", concluyó 'Nole'.
