DESCONECTA, 20 May.
Veinticuatro se consideran muchos años para un gato. Para que nos hagamos una idea, su equivalente en edad humana sería de 114 años, dos años más joven que Misao Okawa, la mujer más vieja del mundo, según el Récord Guinness.
Poppy nació en febrero de 1990 y este año ha cumplido 24 años, convirtiéndose en récord mundial. Para este felino, trepar las cortinas, perseguir moscas y correr son casi un lejano recuerdo, pero este superviviente es el orgullo de su familia.
La gatita es ciega y sorda y como todos, tiene sus pequeñas manías como maullar a todas horas y por todo. Convive con más animales y ha visto pasar a hámsters y conejos por su vida, entre otros.
Cuando le preguntan a su familia cuál es el secreto de la longevidad de Poppy, la respuesta es ejercicio, vida sana y algún que otro capricho como carne de kebab, pollo del KFC, o patatas fritas.
