EDIZIONES, 22 Jun.
La expresión "nacer con un pan bajo el brazo" hace alusión a algún hecho afortunado tras el nacimiento de un bebé. Se dice que todos los bebés nacen con uno, pero el que protagoniza esta curiosa historia lo trae sin fecha de caducidad.
La tripulación de un vuelo de Jet Airways, proveniente de Kochi (India) se vio involucrado en algo totalmente inesperado. Una de las pasajeras embarazadas se puso de parto a las 36 semanas de gestación, en pleno vuelo y a 35.000 pies (unos 10.688 metros).
Por fortuna, entre los miembros de cabina se encontraba Mini Wilson, una azafata que había sido enfermera, que se encargó de traer con éxito al bebé al mundo.
La madre y el bebé fueron trasladados a un hospital después de que el Boeing 737 aterrizó en la ciudad de Bombay, pero ahí no terminó la anécdota.
La compañía dijo a la BBC que era la primera vez que un bebé nacía dentro de un vuelo suyo, por lo que no se les ocurrió mejor manera de celebrarlo que regalando al recién nacido billetes de avión gratuitos para el resto de su vida.
Cabe decir que, si bien es cierto que este tipo de anécdotas no es la primera vez que ocurren, la de Jet Airways se ha convertido en viral por ser la primera de su compañía y por la manera tan generosa que han tenido de celebrarlo.
Cada aerolínea tiene sus propias normas respecto a aceptar mujeres embarazadas a bordo, sin embargo, la mayoría permite que viajen con 36 semanas de gestación siempre y cuando presenten un certificado médico que confirme la fecha prevista de parto.
