MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El viernes, en el último día de plazo, el Gobierno comunicó a la Comisión Europea que no tiene previsto retirar las nuevas condiciones impuestas por el Ministerio de Industria a la OPA de E.ON sobre Endesa. Las Autoridades de Bruselas amenazaron al Ejecutivo español con expedientarle y recurrir su decisión ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Un tira y afloja supone "un grave perjuicio para la imagen del país". Así lo advirtió ayer el secretario de Política Económica del PP, Miguel Arias Cañete, que afirmó que el Gobierno "no se puede permitir un fallo más" en política económica exterior y arremetió duramente contra el ministro de Industria, Joan Clos, al que acusó de empeorar "la malísima herencia" que recibió de su antecesor en el cargo, el ahora presidente de la Generalitat José Montilla.
"España no se puede permitir un fallo más en política económica", advirtió Arias Cañete tras señalar que la transgresión de la normativa comunitaria por parte del Ejecutivo supondrá un "grave perjuicio para la imagen del país" en el exterior además de una pérdida de "credibilidad" y "graves responsabilidades económicas". "¿Qué inversores extranjeros vendrían a un país que no cumple los requisitos de la Comisión Europea?", se preguntó el dirigente popular.
Además, acusó al Gobierno socialista de falta de flexibilidad ya que "nunca rectifica cuando se equivoca" en materia económica y advirtió que la no retirada de las condiciones sobre la eléctrica alemana "tendrá graves consecuencias para España". "Vamos a terminar demandados ante el Tribunal de Luxemburgo", alertó.
En este punto Arias Cañete arremetió con el que, a su juicio, es ahora el máximo responsable de la situación: el ministro de Industria, Turismo y Comercio. "Clos recibió una malísima herencia de Montilla y, por lo visto, está empeñado en empeorarla aunque resulte difícil", dijo el responsable de Economía popular a raíz de la decisión del Ejecutivo de no eliminar las condiciones impuestas desde el Ministerio de Industria a la OPA de la alemana E.ON sobre Endesa, en el día límite fijado por la Unión Europea para esa retirada.
DECIDIRÁN LOS TRIBUNALES
Bruselas amenazó el viernes con expedientar al Gobierno y recurrir ante el Tribunal de Justicia de la UE tras conocer su negativa a retirar dichas condiciones. Europa entiende que la postura española vulnera los principios de libre circulación de capitales y mercancía y la libertad de establecimiento.
El Gobierno español, por su parte, asegura que la oferta de E.ON no garantiza el suministro para un futuro, por lo que no quiere retirar las nuevas condiciones. En ellas, conocidas en noviembre del año pasado, eliminó las obligaciones de desinversión o cesión de activos de Endesa impuestas a E.ON por la Comisión Nacional de la Energía (CNE), pero mantuvo la condición relativa a la venta forzosa de la eléctrica si un tercero adquiere más del 50 por ciento de la compañía alemana.
