El Banco de España propone simplificar la estructura de requisitos de capital de los bancos

MADRID 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ha propuesto simplificar la estructura de requisitos de capital de los bancos europeos a través de la creación de dos colchones que englobarían algunos de los actuales.

   Durante su intervención en el VIII Foro de Banca organizado por 'El Economista' y Accenture, Escrivá ha afirmado que la estructura de requerimientos de capital de los bancos europeos es "excesivamente compleja".

   "La propia EBA [la Autoridad Bancaria Europea] lo ha señalado: Europa ha ido más allá de lo que exigen otras jurisdicciones. Por eso, tenemos margen para reducir la complejidad y, al mismo tiempo, ganar en transparencia y en predictibilidad, sin comprometer la solidez del sector bancario", ha señalado.

   Así, considera que sería "deseable" avanzar hacia un diseño "más simple", apoyado en dos pilares bien definido: un único colchón de capital microprudencial y otro macroprudencial.

   Con respecto al primero, Escrivá señala que podría englobar el actual colchón de conservación de capital y los actuales requerimientos y recomendaciones de Pilar 2. "Esto permitiría al mismo tiempo abrir una discusión sobre el papel del proceso de revisión y evaluación supervisora y del ejercicio de resistencia en la determinación de este colchón", ha explicado.

   En cuanto al único colchón macroprudencial, el gobernador ha señalado que resultaría de fusionar los actuales colchones de capital contracíclico y sistémico.

    "De esta forma, evitaríamos solapamientos, ganaríamos en transparencia y eliminaríamos elementos exclusivos del marco europeo que complican innecesariamente el sistema respecto a los estándares internacionales. Esta propuesta está plenamente alineada con Basilea y ya se aplica en otras jurisdicciones, con estructuras más sencillas, sin comprometer la resiliencia", ha trasladado.

   Durante su intervención, Escrivá ha afirmado que la crisis financiera impulsó cambios "sin precedentes" en la regulación y la supervisión a escala internacional y europea, pero que ahora se observa que este avance ha venido acompañado de un marco normativo y supervisor "cada vez más denso y complejo".

   Ha admitido que esta "acumulación" de reglas y procesos puede afectar a la competitividad del sector y, en última instancia, limitar su capacidad de financiar a la economía y que, a la densidad de normativas, se suma una arquitectura institucional "igualmente compleja" con tres niveles superpuestos: global, europeo y nacional.

    El gobernador ha defendido que el Banco de España está "plenamente comprometido" con el proyecto europeo de simplificar las normas, pero ha subrayado con claridad que esta simplificación no supone desregular ni rebajar la fortaleza de sector bancario.

   "Al contrario, se trata de construir un marco más simple, estable y predecible, capaz de reforzar la capacidad del sistema bancario para contribuir al crecimiento económico, manteniendo intacta la confianza en su solidez", ha agregado.

OTRAS ÁREAS DE MEJORA

   Desde su institución se ha realizado un análisis que ha permitido identificar cinco grandes áreas de mejora en el ámbito regulatorio y supervisor tanto europeo como español, teniendo en cuenta que una de ellas es la simplificación de la estructura de los requisitos de capital.

   Así, al margen de la reducción de los colchones de capital, Escrivá también cree que hay espacio para mejorar los procedimientos supervisores (proceso de revisión y evaluación más orientado al riesgo y no tanto a aumentar el capital; revisar las guías y expectativas supervisoras para aportar mayor claridad y seguridad a las entidades; y reforzar el papel de los equipos conjuntos de supervisión (JST, por sus siglas en inglés).

   Otra área de mejora se encuentra en el ámbito de las normas europeas delegadas o técnicas, conocidas como de Nivel 2 y Nivel 3 que desarrollan las normas principales de Nivel 1. Por ejemplo, el Banco de España ha propuesto "despriorizar" y simplificar más de la mitad de los mandatos que la EBA tiene pendientes: ha planteado reducir alrededor de un 35% de los mandatos del nuevo paquete prudencial y simplificar otro 15%, además de revisar procesos de resolución que hoy "resultan costosos".

   Otro camino para reducir la complejidad regulatoria es aplicar un criterio de proporcionalidad en las obligaciones exigidas a entidades pequeñas y no complejas. "No todas las entidades tienen el mismo tamaño, complejidad o perfil de riesgo, y exigirles las mismas obligaciones puede generar cargas innecesarias que no mejoren la estabilidad del sistema", ha explicado en este sentido.

   La última área está relacionada con los requerimientos de información financiera para las entidades. En los cinco últimos años, según ha expuesto Escrivá, estas obligaciones han crecido un 50%, de tal forma que, a finales de 2024, los bancos tenían que elaborar más de 740 estados, con más de 116.000 puntos de datos por entidad y fecha.

    "Dos tercios de esta información se solicitan con criterios homogéneos a escala europea (Finrep y Corep). A esto hay que añadir las peticiones de información ad hoc, que se requieren de manera recurrente para cubrir necesidades específicas no contempladas en los reportes oficiales", ha trasladado.

   El gobernador ha defendido que su institución ya está abordando esta simplificación como la modificación de su Circular 4/2017 que una vez aprobada, suprimirá siete estados financieros, lo que supone el 34% de los datos financieros requeridos a escala nacional. Además, cree que es posible eliminar un 16% adicional.

    Igualmente, se han suprimido varias peticiones de información 'ad hoc' habituales y se ha reforzado el procedimiento de gobernanza interna para futuras solicitudes, de manera que cada nueva petición esté "plenamente justificada" en términos de necesidad y oportunidad.