CÓRDOBA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Aspromonte, José Ignacio Torres, afirmó hoy que "el tiempo dirá" si la intervención de CajaSur por el Banco de España es peor o no, para el futuro de los empleados de la caja cordobesa, que la fusión de la entidad con Unicaja sin que se hubiera cerrado antes por escrito un acuerdo laboral.
Esta última es, según afirmó hoy en rueda de prensa Torres, la cuestión clave de un asunto en el que "Aspromonte tiene la conciencia muy tranquila", en cuanto a que siempre ha actuado "en defensa de los trabajadores", también cuando su representante en el consejo de CajaSur votó 'no' a la fusión con Unicaja y aprobó pedir ayuda al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), lo que ha llevado a la intervención de la caja por el Banco de España.
Aspromonte entiende que el acuerdo laboral verbal para los empleados de la caja cordobesa que cerró el pasado viernes con Unicaja era "papel mojado" por dos razones fundamentales, porque los sindicatos mayoritarios en Unicaja (CCOO y UGT) no cerraron el acuerdo laboral referido a los trabajadores de la caja malagueña y porque en Aspromonte estaban "seguros de que no se iba a cumplir" el acuerdo verbal, por parte de Unicaja, en cuanto se hubiese aprobado el proyecto de fusión sin contar con un acuerdo laboral por escrito.
Torres, quien también criticó la "incoherencia" de CCOO y UGT por decir que querían la fusión "cuando en el consejo de Unicaja del viernes CCOO votó en contra y UGT se abstuvo", igualmente puso en duda que, como han informado varios ex consejeros de CajaSur, el Banco de España hubiera concedido un nuevo plazo para negociar el acuerdo laboral (hasta el 28 de mayo), una vez que los consejos de ambas cajas hubiesen aprobado su fusión.
Por otro lado, en cuanto a la asunción de responsabilidades por la "situación de extrema debilidad" en la que se encuentra CajaSur, con casi 600 millones de euros de pérdidas al cierre de 2009, el secretario de Relaciones Exteriores de Aspromonte, Antonio Luis Cuesta, afirmó que, en primer lugar la responsabilidad le corresponde al Cabildo Catedralicio de Córdoba (entidad fundadora de CajaSur), seguido de "los representantes políticos (en el consejo de CajaSur), de los impositores y, en último lugar, del representante de Aspromonte".
Pero también son culpables de los últimos números negativos de CajaSur, por cómo y durante cuánto tiempo se ha llevado el proceso de fusión frustrado, la Junta de Andalucía, "que se empeñó en una fusión que no era buena para nadie", Unicaja, CCOO y UGT, dando lugar ahora a un "futuro incierto" para los trabajadores de la caja cordobesa, aunque Cuesta espera "que los gestores del FROB estabilicen rápidamente la entidad y establezcan una solución que, para Aspromonte, no es otra que la fusión con otra caja, pero que sea mejor en términos económicos, laborales y sociales".
