MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, aseguró hoy que las negociaciones entre Gobierno, patronal y sindicatos para cerrar la reforma laboral van en la buena dirección y que podría producirse un preacuerdo a corto plazo.
El dirigente sindical, que compareció en rueda de prensa para hacer un balance sobre el diálogo social, reconoció que, tras el alejamiento inicial en las posiciones de unos y otros, las negociaciones sufrieron un "punto de inflexión" hace unas semanas, despejándose así el camino hacia el acuerdo.
Los contactos entre las partes se han intensificado en los últimos días y en la mesa, explicó Méndez, se está trabajando en un acuerdo que combine de forma adecuada la demanda sindical de dar más seguridad a los trabajadores con la exigencia empresarial de lograr más flexibilidad.
Para el secretario general de UGT, una de las medidas que concederán más seguridad al trabajador pasa por limitar el encadenamiento abusivo de contratos temporales, especialmente de los de obra o servicio determinado, y por introducir más transparencia en la cadena de subcontratación.
En este sentido, destacó que si se limitaran los contratos de obra y éstos se convirtieran en puestos de trabajo de carácter indefinido, la tasa de temporalidad española, situada por encima del 30%, sufriría una reducción "sustancial".
En lo que respecta a las subcontratas, Méndez indicó que se está trabajando para ordenarlas, analizándose la posibilidad de establecer un mecanismo de coordinación de los representantes de los trabajadores y un registro donde las subcontratas deban identificarse.
Otros ámbitos de la futura reforma laboral, y que ya entrarían en el campo de la flexibilidad, tienen que ver con el contrato de fomento del empleo estable, cuya indemnización por despido improcedente es más barata que la del contrato indefinido ordinario (33 días por año trabajado frente a 45 días).
En este punto, el dirigente sindical recordó que la mesa está estudiando la conveniencia de ampliar el contrato de fomento a algún colectivo más y que ésta sea la figura contractual a la que se conviertan los contratos temporales, pues actualmente sólo cabe producir conversiones a contratos indefinidos ordinarios.
"AVANCES INCUESTIONABLES" GRACIAS AL DIÁLOGO SOCIAL.
Junto a ello, se barajan reducciones en las cotizaciones al desempleo de los contratos fijos y en las del Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), una demanda empresarial que los sindicatos están dispuestos a aceptar siempre que se trate de una rebaja "moderada.
La contrapartida sindical es que a cambio de reducir cuotas se incrementen las prestaciones del FOGASA, que no han mejorado en 25 años, y se amplíe la protección por desempleo a determinados colectivos. "Aunque no estoy hablando de ningún desenlace, estamos en una línea razonable que nos permitiría alcanzar un preacuerdo en un corto espacio de tiempo", zanjó Méndez.
Al margen de la reforma laboral, el dirigente de UGT quiso destacar que el diálogo social ha propiciado en estos dos años de Gobierno socialista "avances incuestionables" en los derechos de los trabajadores. En este punto, destacó que la Ley de Dependencia y la Ley de Igualdad tendrán para el Estado del Bienestar una importancia similar a la que tuvo en su día la universalización de la Sanidad, de la Enseñanza y de las pensiones.
También fue fruto del diálogo social el proceso de regularización de extranjeros, un "éxito" que, según Méndez, deberá consolidarse este año y que está despertando mucho interés en Estados Unidos, país que ahora está debatiendo la posibilidad de legalizar a 12 millones de trabajadores inmigrantes, la mayoría mexicanos.
En este sentido, el dirigente sindical desveló que Estados Unidos está sirviéndose de la experiencia española para ver cómo puede efectuar su propio proceso. De hecho, un grupo de congresistas norteamericanos ha visitado a las organizaciones sindicales y empresariales españolas para interesarse por la regularización que se llevó a cabo aquí.
