MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La pobreza se reduciría en España en cerca de un 10% si se eliminara por completo la discriminación que padecen las mujeres respecto a los hombres, según un estudio presentado en un seminario sobre desigualdad organizado por la Fundación BBVA y el Ivie.
De acuerdo con los resultados de este informe, más del 90% de las mujeres trabajadoras de España, Francia y Alemania cobran entre 90 y 210 céntimos menos por hora que los hombres en un empleo similar, lo que representa una pérdida de rentas de entre el 5% y el 6% sobre el total de ingresos familiares.
Esta situación contrasta notablemente con casos como los de Bélgica o Dinamarca, donde la menor discriminación que padecen las mujeres permite que la pérdida de ingresos se sitúe entre el 1% y el 1,5%.
Las familias que sufren de manera más acusada pérdidas de ingresos son las de rentas más bajas, porque es en este segmento familiar donde las mujeres están más discriminadas, pues sólo pueden acceder a trabajos de menor cualificación y peor remunerados.
De acuerdo con este informe, las bajas perspectivas de ingresos por el trabajo hacen que, en ocasiones, las mujeres opten por no acceder al mercado laboral, lo que incrementa todavía en mayor medida la pobreza de estas familias.
También se advierte en este estudio del impacto que la discriminación en los hogares, cada vez más numerosos, donde la mujer trabajadora vive sola con sus hijos o teniendo a su cargo a personas dependientes.
Otro informe presentado en el marco de este seminario refleja que la mayor fuente de discriminación se debe a la menor participación de la mujer en el mercado de trabajo y a las mayores tasas de desempleo que soporta.
El grado de discriminación es muy diferente según los grupos de edad y los niveles de estudios. Así, mientras que casi no hay discriminación entre los más jóvenes y mejor preparados, la discriminación es muy fuerte entre las personas de más de 50 años y con bajos niveles formativos.
EVOLUCIÓN DE LA DESIGUALDAD.
Por lo que respecta a la evolución de la desigualdad en España, los resultados de este estudio muestran que la discriminación se ha reducido en los últimos 20 años de manera sustancial, especialmente como consecuencia del incremento de la participación de la mujer en el mercado laboral y de la mejora de sus niveles educativos.
Desde una perspectiva internacional, las pérdidas de bienestar debido a la discriminación por razón de género son para el total de la población española más elevadas que para las poblaciones de Italia, Alemania y Francia. No obstante, si se considera exclusivamente la población ocupada, Alemania es el país que soporta mayor pérdida de bienestar, seguido de España, Francia y Alemania.
