Economía.- PP y CiU enmiendan las recomendaciones del Pacto de Toledo para rechazar que suba la edad legal de jubilación

Carles Campuzano
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Actualizado: lunes, 24 enero 2011 16:01

MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Partido Popular y CiU han presentado sendos votos particulares al informe con las recomendaciones sobre el Pacto de Toledo que mañana votará el Pleno del Congreso, en los que constatan su rechazo a un eventual aumento de la edad legal de jubilación más allá de los 65 años actuales y plantean diversas líneas de actuación para lograr el "necesario" objetivo de prolongar la vida laboral de los españoles, pero de manera voluntaria, flexible e incentivada.

Ambos grupos quieren que el informe vaya más lejos que limitarse a constatar la falta de acuerdo acerca de un eventual aumento de la edad legal, tal y como hace el texto aprobado el pasado 29 de diciembre por la Comisión del Pacto, ya que, a su juicio, deja la puerta abierta al Gobierno para incluirlo en el anteproyecto de ley que prevé aprobar este viernes.

Así, en sus propuesta, a la que ha tenido acceso Europa Press, los 'populares' plantean que todas las actuaciones han de contribuir a incrementar al "edad real de acceso a la jubilación, equiparándola en lo posible a la edad legal", que se reconoce explícitamente en los 65 años.

En este sentido, los 'populares' argumentan que "hay mucho recorrido para aumentar la edad efectiva de retiro, que actualmente no alcanza los 65 años en más de la mitad de los casos.

Asimismo, considera que la prolongación de la vida labora más allá de esta edad debe "estimularse adecuadamente para resultar atrayente para un número creciente de personas", pero siempre como "opción".

CIU PIDE UN NUEVO MARCO LEGAL.

Por su parte, el texto presentada por CiU considera que "no parece imprescindible y necesario" aumentar la edad legal de jubilación que hoy existe "de manera homogénea y forzosa para el conjunto de las personas" para conseguir el objetivo de prolongar la presencia activa de las personas en el mercado laboral.

Por contra, plantean que, en un contexto de creciente esperanza de vida y disminución de la población activa, se debe promover un nuevo "marco legal" basado en la flexibilidad y la voluntariedad, en el que la pensión dependa más del número de años cotizados, su esperanza de vida tras el retiro y el momento en el que decida hacerlo que de otros factores.