MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de más de quinientos sindicalistas mantuvieron cortada la Gran Vía, al invadir la calzada al grito de "huelga, huelga' a la altura de la plaza de Callao y comenzaron a caminar en dirección a la plaza de la Cibeles desde las 11.30 horas aproximadamente y hasta las 14.00 horas de hoy.
Los sindicalistas que participaron en la protesta portaban banderolas de CGT, UGT y CC.OO. y permanecían rodeados por efectivos de la Policía Nacional que se encontraban controlando la protesta sin intervenir.
La secretaria general de Comercio, Turismo y Hostelería de CC.OO. de Madrid, Paloma Vega, reconoció que el acto fue "espontáneo" y para exhibir a todos los representantes políticos que los trabajadores habían tomado la Gran Vía para escenificar que la calle era suya.
Asimismo, destacó que la huelga "está siendo un éxito" y, por ello, exigió una "rectificación" en las "políticas neoliberales" de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, así como a la reforma laboral aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Durante su recorrido en dirección a Cibeles, los representantes de los sindicatos congregados en la protesta procedieron a cerrar los escasos comercios que a las 10.00 horas permanecían abiertos, pues la actividad comercial en el centro de Madrid a esas horas era escasa.
A pesar de estos incidentes, Vega aseguró que "el piquete está siendo pacífico" y apuntó que exhibe su "libertad de expresión". "No estamos en la agresión ni coartando a nadie", zanjó.
