MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado este miércoles que "si no se hubiera privatizado tanto, si no se hubiera degradado tanto la función pública", España no tendría el nivel de corrupción que tiene actualmente.
Así lo ha señalado durante su intervención en la clausura del Congreso Constituyente de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP-UGT), la mayor y más importante del sindicato, con más de 270.000 afiliados, en la que ha defendido, no obstante, que "los derechos de los empleados públicos son la garantía de que vivimos en un Estado de Derecho, que garantiza el cumplimiento de las leyes, más allá de los responsables políticos que haya en cada momento".
Álvarez ha afirmado que los servicios públicos "son la garantía de derechos y libertades para los ciudadanos, y son la pieza fundamental del Estado de Bienestar", y ha opinado que la situación de crisis de los últimos años ha puesto de manifiesto "hasta qué punto la función pública, con los derechos y estatus de los empleados públicos, ha sido importante para los ciudadanos de este país".
Además, considera que "los empleados públicos no preservan privilegios, sino derechos para todos los ciudadanos", por lo que ha expresado el compromiso de UGT en la defensa de las políticas públicas "para el presente y el futuro".
"Debemos dotarnos de instrumentos que sirvan para construir un Estado que colabore, que sume esfuerzos, para dar respuesta a los graves problemas de las personas". "Las nuevas elecciones son una oportunidad para solucionar los problemas de las personas", ha añadido.
LAS ELECCIONES, UNA "GRAN OPORTUNIDAD".
En este sentido, ha manifestado que el proceso de elecciones generales que se inicia en los próximos días "no se puede ver como una frustración, sino como una gran oportunidad de poder situar cuales son las propuestas que tenemos para poner voz a los problemas de las personas que no tienen voz".
Entre estos, ha citado los problemas de los casi cinco millones de desempleados y de los parados mayores de 55 años que no tienen acceso ni a un trabajo ni a la jubilación, por lo que ha pedido la restauración del contrato de relevo, que incluya a los servicios públicos.
También ha reclamado saber si va a haber un plan de choque por el empleo, para dar respuesta a los parados. "Que no digan que no hay dinero, porque dinero sí hay. Y, si no, que controlen el fraude o los paraísos fiscales", ha enfatizado.
Además, ha señalado que, durante este proceso de campaña electoral, los partidos políticos "deben decir qué piensan hacer respecto al Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TTIP) y con Canadá (CETA). "Este tratado es más lesivo para los intereses de los trabajadores que muchas de las reformas que hemos vivido", ha añadido.
CONSTITUIDA LA FEDERACIÓN DE EMPLEADOS PÚBLICOS.
UGT ha constituido este miércoles su Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos, la mayor y más importante del sindicato, con más de 270.000 afiliados, fruto de la unión entre la actual Federación de Servicios Públicos (FSP) y la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT, además de otros sectores ubicados en diferentes organismos del sindicato.
En su 42º Congreso Confederal UGT aprobó reducir de seis a tres sus federaciones sectoriales con el objetivo de modernizar su estructura para hacerla más eficaz y cercana a los trabajadores y la sociedad.
La nueva federación de servicios públicos extenderá su acción sindical a colectivos que, bajo la iniciativa o gestión privada, prestan servicios públicos esenciales a la ciudadanía.
Así, en esta primera federación sectorial estarán integrados los empleados de las tres administraciones junto a los trabajadores de Enseñanza, Sanidad, Correos, Dependencia, Servicios Sociosanitarios, Limpieza, Mutuas y Ambulancias.
El congreso constituyente de la nueva federación ha elegido como secretario general, con el 85,97% de los votos, a Julio Lacuerda, quien ha estado 20 años al frente de la ya extinta Federación de Servicios Públicos de UGT (FSP).
