MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, rechazó hoy que el "mayor problema" del mercado laboral español sea la indemnización por despido, por lo que descartó acometer una reforma en este sentido.
"No creemos que el problema más grave del mercado de trabajo, en un país con más de un 30% de empleo precario, sea la indemnización por despido, basta ver la realidad y cómo está funcionando el mercado laboral", añadió Solbes, que participó hoy en los Desayunos Informativos de Europa Press.
No obstante, admitió que cuando los sistemas de despido son más rígidos o introducen más trabas, el empleo siempre se ajusta por precio o por cantidad. "A mayor nivel de precio y, por tanto, a mayor nivel de trabas, tendremos más cantidad de despido y, al contrario,", explicó Solbes.
El ministro indicó que el debate sobre la indemnización por despido es una de las tres medidas, junto con la rebaja del Impuesto sobre Sociedades y que el Estado dé financiación al sector privado, que "preocupan" a algunos sectores económicos y que no están incluidas en ninguna de las medidas que ha aprobado el Gobierno porque, a su juicio, no son necesarias.
"Si estas tres medidas no existen, parece que el resto de las medidas no valen", lamentó Solbes, tras recordar que el paquete económico aprobado por el Ejecutivo supone una inyección de 10.000 millones de euros en 2008 y 9.000 millones en 2009. "No hay ningún Gobierno en Europa que haya tomado medidas de esta envergadura", reiteró.
IMPUESTO DE SOCIEDADES, EN LA MEDIA DE LA UE.
Sobre la rebaja del Impuesto sobre Sociedades, dijo que en términos reales se encuentra en la media de la UE y que, por tanto, está "bastante bien situado" en términos de competitividad con las empresas de otros países.
Además, apuntó que cuando todavía no se ha terminado de aplicar la primera rebaja del Impuesto sobre Sociedades, no puede ser que "el gran problema" sea reducirlo. "No tengo nada en contra (de bajarlo), y a mí no me parece mal si dispusiéramos de recursos para hacerlo", añadió Solbes, que se mostró "preocupado" por la propuesta del PP de rebajar cinco puntos el impuesto, lo que tendría un coste de 12.000 millones de euros.
En cuanto a la financiación al sector privado, señaló que el Gobierno cuenta con márgenes para hacer algo y que está dispuesto a "agotarlos al máximo", pero indicó que no se le puede pedir "ir más lejos" de lo que puede hacer.
MODERACIÓN SALARIAL.
Respecto a la posibilidad de introducir cambios en la negociación colectiva, Solbes dijo que el Gobierno no puede "imponer ni obligar" a nada en el ámbito salarial privado, pero quiso dejar claro, "por activa y por pasiva", que el "elemento más grave" que puede sufrir la economía española son los efectos de segunda ronda que lleven a una "espiral de salarios" con un "impacto negativo".
Dicho esto, añadió que tampoco "se puede hacer recaer sobre los trabajadores todo el ajuste (de la desaceleración de la economía) ni mucho menos".
MAYOR CONTRIBUTIVIDAD DE LAS PENSIONES.
El ministro, que defendió la importancia de acordar todas estas medidas dentro del diálogo social porque las decisiones adoptadas con empresarios y trabajadores son "más eficientes", se refirió también al sistema público de pensiones y se mostró partidario de introducir una "mayor relación" entre lo que se aporta y lo que se recibe.
"En un sistema como el nuestro, cualquier elemento que vincule las aportaciones y las prestaciones tiene sentido, lo que no es incompatible con unos mínimos que deban permitir una pensión mínima. El incremento del concepto de contributividad a mí me parece positivo", reiteró.
Así, dijo que no se ha llegado "al límite de la contributividad y al límite de las correcciones para que el sistema sea más eficiente", por lo que afirmó que hay "muchas cosas" que se pueden hacer. "Una mayor relación entre lo que se aporta y lo que se recibe, tiene sentido, y tiene todo el sentido del mundo incentivar que aquellos que quieran seguir trabajando tengan algunas ventajas adicionales", subrayó.
Finalmente, indicó que el sistema de pensiones español funciona bien, pero apuntó que "no conviene bajar la guardia", sino que es importante someterlo a "revisión permanente" porque siempre hay cosas nuevas que se pueden hacer.
