WASHINGTON, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los líderes políticos de Washington han acelerado este jueves los contactos para tratar de cerrar unos presupuestos para 2011 que sustituyan a los vetados por el Partido Republicano en la Cámara de Representantes. Demócratas y republicanos deben alcanzar un acuerdo antes del fin de semana, fecha límite en la que se produciría el bloqueo del Gobierno y, por extensión, la paralización de las actividades públicas no esenciales.
El líder del Partido Demócrata en el Senado, Harry Reid, ha reconocido que no es "muy optimista" tras reunirse con miembros de su formación, poco después de verse con el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, y con el presidente norteamericano, Barack Obama.
Tanto Reid como Boehner comparecieron tras el encuentro celebrado en la Casa Blanca para confirmar que no se había logrado cerrar un acuerdo, pero que los contactos seguirán a lo largo del día. "Vamos a seguir trabajando para lograrlo. No es fácil, pero es factible", ha declarado el presidente de la Cámara Baja ante la prensa.
El tono mostrado por ambos líderes, más conciliador, contrasta con la postura mantenida en las últimas jornadas, cuando ambas partes se habían acusado mutuamente de obstaculizar el proceso.
Los demócratas han asegurado que existe un acuerdo general sobre las distintas cifras, pero Reid ha denunciado que la otra parte bloquea el diálogo al oponerse a unas provisiones que, de salir adelante, pondrían trabas al dinero público destinado al control de la natalidad y a la protección medioambiental.
En términos estrictamente monetarios, la disputa gira en torno a unos cinco millones de dólares, según fuentes citadas por 'The New York Times'. Boehner había presentado el miércoles una reducción del gasto público de unos 40.000 millones de dólares, aunque ahora la habría revisado hasta los 39.000 millones. Por su parte, los demócratas se han sentado este jueves con un plan que plantea 34.500 millones en recortes, 3.000 millones de los cuales procederían del gasto del Pentágono.
RECHAZADO UN APLAZAMIENTO
Los republicanos han sacado adelante este jueves en la Cámara de Representantes un documento mediante el cual quedaría cerrado el presupuesto del Pentágono para el restante año fiscal y que fijaría una prórroga de una semana para el resto de partidas del Gobierno, al tiempo que recortaría en 12.000 millones el gasto actual.
La medida, que carece de opciones de triunfo en el Senado --controlado por el Partido Demócrata-- daría a la Casa Blanca una semana más de margen para negociar un acuerdo y evitar la inminente paralización pública, pero Obama ya ha prometido que lo vetará.
El mandatario norteamericano considera esta prórroga "una distracción del trabajo real" que debe llevar a un "compromiso razonable" entre las dos partes, según un comunicado de la Casa Blanca.
