MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, aseguró hoy que el Gobierno sigue confiando en alcanzar una acuerdo con las comunidades autónomas sobre la reforma del modelo de financiación autonómica, pese a las críticas que recibió ayer el vicepresidente económico, Pedro Solbes, por parte de casi todos los partidos políticos durante el debate en el Congreso de los Diputados.
Así lo puso de manifiesto De la Vega en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que aseguró que el nuevo sistema que pondrá en marcha del Ejecutivo será un modelo "de ganadores y no de perdedores" porque ninguna comunidad perderá en el reparto.
"Con el modelo actual todas las CC.AA. son perdedoras, ahora empieza (un modelo) de ganadores porque todas ganarán con el nuevo sistema", señaló De la Vega, tras asegurar que el Gobierno seguirá trabajando e intensificará las negociaciones para alcanzar un acuerdo en un periodo de tres meses para que el nuevo modelo pueda entrar en vigor en el año 2009.
"Yo estoy segura de que vamos a conseguir componer un acuerdo, el 'puzzle' con todas sus piezas", señaló la vicepresidenta, quien confió incluso en encontrar un punto de encuentro con los partidos catalanes atendiendo a las dificultades concretas de esta comunidad y cumpliendo su estatuto de autonomía.
Así, aseguró que el Gobierno no dejará de hacer "lo que tenga que hacer" para alcanzar el acuerdo, poniendo al servicio de los ciudadanos todo "el talento, el talante y la inteligencia" para conseguirlo. "El modelo actual no funciona y todos estamos interesados en cambiarlo, también el Gobierno", señaló.
SI NO HAY ACUERDO, DECIDIRÁ EL GOBIERNO.
No obstante, De la Vega recordó, tal y como ayer mismo ya dijo el propio Solbes, que si no se alcanza un acuerdo global en el seno del Consejo de Política Económica y Fiscal, "está en las reglas del juego" que el Gobierno sea el que tome la última decisión.
Con todo, volvió a recordar la propuesta del Ejecutivo, que se centra en conseguir un nuevo modelo que mejore los recursos de todas las CC.AA., que incremente la autonomía financiera de cada una de ellas, que asegure y potencie la cohesión territorial y que nazca del "máximo consenso posible".
