MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Comercio e Industria de la Administración británica está llevando a cabo la segunda fase de su Programa de Carbono Reducido en la Edificación (LCBP, por sus siglas en inglés), al que ha destinado un presupuesto de 50 millones de libras (33,5 millones de euros) durante los próximos 18 meses.
El programa comprende la aplicación de las tecnologías de microgeneración --sobre todo relacionadas con la energía solar-- en edificios públicos, especialmente centros escolares. Así, en el apartado solar fotovoltaico, el Departamento ha seleccionado a los suministradores Solarcentury, Dulas y British Gas, que ofrecen su asesoramiento.
Precisamente, la empresa Solarcentury reveló que ha instalado más de 500 sistemas fotovoltaicos por todo el país, que "reducirán las emisiones de CO2 en más de 25.000 toneladas en los próximos 25 años", según su consejero delegado, Jeremy Leggett.
"La energía solar en las escuelas y los edificios públicos, unida a medidas de eficiencia energética, puede reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles de manera dramática e inmediata", explicó Leggett.
"Es fantástico que ahora otros colegios ya tengan la oportunidad de beneficiarse de las tecnologías solares. Los niños responden muy positivamente a las prácticas de sostenibilidad y es imprescindible que les implicamos en ellas en sus vidas cotidianas", detalló.
