SEVILLA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) anunció hoy que continuará con movilizaciones ante la situación "abusiva, permanente y estructural" de precios "cada vez más bajos para los productores y subidas imparables para los consumidores" de la que dice estar "harta".
En rueda de prensa, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, señaló que se trata de una situación "anormal e inexplicable" que se ha convertido en "un grave problema estructural" para la economía y la sociedad españolas.
En este sentido, recordó que a finales del pasado año la Administración central ofreció ayudas "ante lo que se creía un contexto coyuntural", si bien "no se ha arreglado".
Ante esto, UPA exigió que estas ayudas se den al cien por cien y que "si la situación no mejora, se ofrezcan nuevas medidas", ya que si no "éstas no pasarán de ser un parche".
Ramos precisó que la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos propone que se trate a la agricultura y a la ganadería como a un sector estratégico, que se apruebe una ley de márgenes comerciales, se implanten códigos de buenas prácticas comerciales, y se adopte un plan de choque y de reestructuración integral de la ganadería.
Dicho plan de choque --señaló-- debe incluir compensaciones sociales para los ganaderos que "se están viendo obligados a abandonar", el apoyo al modelo cooperativo de integración, la identificación al consumidor de las canales y piezas nacionales de carne, campañas de promoción del consumo, apoyo a la ganadería extensiva, ayudas directas en función de los kilos de pienso consumido, el incremento del IVA de compensación y medidas fiscales.
Además, el secretario general de UPA detalló que solicitarán a la Fiscalía General del Estado que inicie una investigación sobre la política de fijación de precios y los márgenes comerciales de las grandes cadenas de distribución comercial.
En este sentido, el secretario general de UPA-A, Agustín Rodríguez, advirtió de que ha aumentado la concentración de la demanda en origen en tres grandes grupos de distribución --Carrefour, Mercadona y Eroski--, con una cuota de mercado por facturación del 49,5 por ciento, frente a alrededor de 900.000 agricultores y cerca de 4.000 entidades asociativas agrarias, lo que genera "un desequilibrio de fuerzas en la cadena con consecuencias negativas y directas para todos".
Entre las acciones que llevarán a cabo, en principio, hasta finales de año en busca de soluciones enumeró manifestaciones en Andalucía, "donde se prevé una para el mes de octubre"; recogida de firmas para plantear una iniciativa legislativa popular; acciones conjuntas con organizaciones de consumidores, y presión permanente a las Administraciones públicas.
"ERROR DE BULTO DE LA UNIÓN EUROPEA".
UPA criticó las últimas decisiones de la Unión Europea (UE) en el ámbito del sector agrícola y ganadero, ya que, según explicó Ramos, es "un error de bulto" prescindir del sector primario que es básico. Al hilo de esto, señaló que la UE no oye a la sociedad ni a los representante de cada país, ya que "se tienen que garantizar los alimentos para todos a un precio razonable", algo que calificó de "imposible con la eliminación de barreras comerciales".
En cuanto a cifras de la brecha entre lo que reciben los agricultores y lo que reciben el resto de la cadena de distribución, el secretario general de UPA-A precisó que el por el cerdo los ganaderos reciben el 24% y la distribución el 70%; en la patata, el agricultor reciben el 16% y el 84% el resto, y en el caso del tomate, el agricultor recibe el 19 por ciento y el 81% la cadena de distribución.
Asimismo, respecto a la diferencia entre lo que recibe el agricultor y lo que paga el consumidor indicó que existe un incremento del 224% en el melocotón, de un 330 en el albaricoque, de un 500% en el brócoli, y por las alcachofas el consumidor paga un 833%.
