MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
Más de 800.000 pymes han respaldado la puesta en marcha de una Ley de Contratos de Distribución que aporte seguridad jurídica a las relaciones entre proveedores y distribuidores y evite situaciones de "abusos y excesos" contractuales que ponen en peligro su continuidad y viabilidad económica.
De esta forma, las principales patronales de los distintos sectores de la distribución minorista han expresado su apoyo unánime a la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) en su iniciativa para la puesta en marcha de esta norma 'paraguas', que englobará a todos los sectores económicos del sector minorista.
El objetivo de esta nueva normativa es potenciar la autonomía e independencia empresarial de las pymes distribuidoras e impulsar la seguridad jurídica en las relaciones entre proveedores y distribuidores para evitar abusos contractuales, conflictos innecesarios y sentencias contradictorias de los Tribunales de Justicia.
Además, según señaló Faconauto, esta ley ayudará a consolidar una distribución fuerte y competitiva, promoviendo un comercio más activo y enfocado al consumidor.
Con la idea de poner en marcha esta ley, la cúpula directiva de Faconauto mantuvo hace unos días una reunión con los máximos responsables de la Confederación Española de Comercio (CEC); la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicios (CEEES); la Federación Catalana de Vendedores de Vehículos a Motor (FECAVEM); la Asociación Española para el Desarrollo y Defensa del Franquiciado (AEDEF); la Asociación de Distribuidores Españoles de Tecnologías de la Información (ADETI) y la Asociación Española de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción (ANDIMAC).
Durante la reunión, estas asociaciones adoptaron una postura unánime y coincidieron en promover de forma activa junto a Faconauto la recogida de un mínimo de 500.000 firmas con el fin de tramitar por iniciativa popular la aprobación de una Ley de Contratos de Distribución que regule las distintas modalidades de contratos de distribución que se utilizan en el comercio minorista.
"CONDICIONES LEONINAS"
Las distintas patronales del sector de la distribución destacaron entre las "condiciones leoninas" que los proveedores imponen a sus distribuidores la ausencia de seguridad jurídica en los tratos preliminares a la negociación, llegando incluso a obviarse la firma de la carta de intenciones que viene a "formalizar" el inicio de la relación contractual.
Asimismo, otro de los "desequilibrios contractuales" que las distintas asociaciones coinciden en denunciar es la suscripción de contratos de duración determinada renovables anualmente, lo que genera una "gran inseguridad" a las pymes distribuidoras que han debido acometer importantes inversiones en personal y estructuras amortizables a medio plazo.
Todas las asociaciones coincidieron en que los "abusos contractuales más flagrantes" se producen en los casos de resolución del contrato ya que se obliga al distribuidor a renunciar a su derecho a la amortización de sus inversiones y a obtener una compensación por la clientela ganada.
