MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La dirección de British Airways no acudió a la reunión prevista para esta mañana con los sindicatos y solicitó hoy la mediación de la ACAS, la autoridad de arbitraje, para tratar de solventar la dísputa entre los trabajadores y la compañía, que pretende recortar 4.000 puestos de trabajo y aplicar una congelación salarial durante los próximos dos años, según informa 'The Guardian'.
Ambas partes deberían haber cerrado un acuerdo antes de que finalizara el pasado mes de junio, según los plazos impuestos la compañía, pero las negociaciones se rompieron ayer sin que se produjeran progresos, a pesar de las intensas semanas de encuentros.
Según el rotativo, después de que se concluyera sin éxito la reunión de ayer, los sindicatos ya estaban preparándose para la negociación de hoy, a la que British Airways "decidió no acudir".
De esta forma, la aerolínea habría optado por acudir a la ACAS, con la que todavía no habría una fecha prevista para el inicio de la mediación.
La compañía pretende que los sindicatos acepten un acuerdo que supone el despido de 4.000 trabajadores --el 10% de la plantilla-- y una congelación salarial de dos años. Asimismo, querría que los empleados aceptaran diversos cambios en las condiciones laborales.
British Airways considera que el recorte es "esencial" para garantizar su supervivencia, teniendo en cuenta que, según estimaciones del rotativo, pierde tres millones de libras (3,4 millones de euros) de caja cada día.
No obstante, The Unite, que representa a 28.000 trabajadores de la compañía, acusa al consejero delegado de la aerolínea, Willie Walsh, de estar tratando de "intimidar". En este sentido, los principales sindicatos aseguraron que la semana pasada la compañía "minó" las negociaciones al anunciar que 6.940 trabajadores se habían acogido voluntariamente a recortes temporales de sueldo y que 800 de ellos trabajarán sin sueldo durante un mes.
