BRUSELAS, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea propuso hoy cuatro medidas cuyo objetivo es reducir las cargas administrativas que impone el derecho mercantil comunitario a las empresas. De acuerdo con las estimaciones de Bruselas, este recorte puede llegar a generar beneficios superiores a 600 millones de euros, especialmente para las pymes.
En primer lugar, las empresas ya no estarán obligadas a publicar informaciones comerciales en los boletines oficiales nacionales. Además, podrán reutilizar las traducciones certificadas en un Estado miembro cuando creen sucursales en otros países de la UE.
En el área de contabilidad, las sociedades matriz cuyas filiales tengan un papel negligible en el futuro no deberán presentar cuentas consolidadas. En cuarto lugar, las empresas de tamaño medio quedarán dispensadas de presentar información detallada en sus cuentas anuales.
El comisario de Mercado Interior, Charlie McCreevy, aseguró a través de un comunicado que "la actividad económica se ve fuertemente obstaculizada por costes administrativos inútiles y desproporcionados", y prometió proseguir los esfuerzos para recortar estas cargas innecesarias con el objetivo de facilitar que la economía de la UE pueda hacer frente a los desafíos de un entorno económico internacional más competitivo.
Por su parte, el responsable de Industria y Empresa, Günter Verheugen, resaltó que la reducción de las cargas administrativas constituye un "elemento central" para "impulsar la economía de la UE, particularmente si se consideran los beneficios potenciales para las pymes, que son los principales motores del empleo".
Las medidas presentadas este jueves forman parte de la segunda tanda de actuaciones rápidas del programa que tiene como objetivo reducir las cargas administrativas para las empresas un 25% de aquí a 2012. Bruselas presentará nuevas propuestas en este sentido en verano.
