Economía/Empresas.- Cinco de los nueve sindicatos rechazan el acuerdo previo con empresarios para reflotar Alitalia

Actualizado: viernes, 31 octubre 2008 18:28

ROMA, 31 Oct. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -

Cinco de los nueve sindicatos de Alitalia que se reunieron hoy con el consorcio empresarial Compañía Aérea Italiana (CAI) han rechazado definitivamente firmar el acuerdo sobre el contrato laboral propuesto por CAI, informaron hoy fuentes sindicales.

Concretamente, el sindicato autónomo Sdl junto con los de pilotos Anpac y Up, y los de tripulantes de cabina Anpav y Avia han sido los que se han negado a firmar el acuerdo, que era el paso previo para que el consorcio presentara una oferta vinculante para salvar a la aerolínea de bandera italiana de la quiebra.

De esta forma, sólo los cuatro sindicatos mayoritarios --Cgil, Cisl, Uil y Ugl-- decidieron dar su visto bueno al contrato, mientras que los cinco autónomos, que son los que se habían mostrado más reticentes al acuerdo, rechazaron finalmente el plan.

Esta misma mañana, el Gobierno italiano había recordado que a las 00.00 horas de hoy finalizará el plazo límite para que la presentación de la oferta de compra vinculante y que sin ésta ya no será posible salvar a la compañía de bandera italiana de una quiebra definitiva y segura.

Así lo refirió el subsecretario del Consejo de Ministros de Italia, Gianni Letta, durante el encuentro de urgencia que mantuvo hoy con empresarios y sindicatos para intentar cerrar un acuerdo sobre el contrato laboral, paso previo y necesario para la presentación de la oferta de compra.

Según refirieron los sindicatos, Letta, que se ha encargado de representar al Gobierno durante las negociaciones, fue muy claro en su exposición y volvió a hacer un llamamiento a todas las partes para que éstas se pongan de acuerdo de una vez por todas.

Asimismo, fuentes sindicales explicaron a los medios italianos que el presidente de CAI, Roberto Colaninno, habría insistido una vez más en que sin la firma de los sindicatos, los empresarios no presentarán ninguna oferta de compra y por tanto, se echará a perder la última oportunidad para evitar la bancarrota.