MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El grupo bodeguero García Carrión esquiva el actual escenario de desaceleración del consumo, al aumentar su volumen de negocio un 20% en los cuatro primeros meses del año, según señaló a Europa Press su presidente José García Carrión.
Las ventas de la compañía no se han visto afectadas por la crisis económica, al aumentar un 10% hasta abril, al que se sumará un 10% adicional que aportará Vinartis, la firma bodeguera que adquirió el pasado febrero al banco Rabobank por 75 millones.
"Somos unos privilegiados al crecer un 20%, pero estamos con mucha precaución", subrayó el presidente de la compañía, quien consideró que "lo peor de esta crisis es la incertidumbre".
Según dijo, la crisis económica está repercutiendo menos en los alimentos y bebidas, aunque reconoció que los consumidores están adquiriendo productos con un nivel de categoría inferior y con un precio más bajo, lo que afecta a la rentabilidad.
En la actualidad, la compañía está inmersa, junto a El Pozo, en una investigación formal por parte de la Comisión Europea sobre las ayudas públicas concedidas en 2007 por un valor total de 29,6 millones de euros para ampliar y modernizar algunas de sus fábricas ubicadas en España.
Ambas compañías negaron haber recibido ayudas públicas ilegales y aseguraron a Europa Press que ninguna administración les ha remitido ninguna comunicación oficial sobre la apertura de una investigación formal.
NO VARIARA INVERSIONES POR LA INVESTIGACION DE BRUSELAS.
Concretamente, José García Carrión aseguró que las investigaciones de Bruselas no supondrán modificaciones en las inversiones de la compañía, que ascienden a 400 millones de euros en los últimos cuatro años.
"No hay ninguna irregularidad", garantizó García Carrión, en declaraciones a Europa Press, al tiempo que aseguró que la compañía es "superescrupulosa" con los documentos y los plazos.
En este sentido, se mostró tranquilo con el anunció hecho por Bruselas, porque la compañía, cuyas subvenciones bajo inspección alcanzan los 14,5 millones, no ha hecho "nunca" ninguna inversión sin contar con todas las autorizaciones necesarias.
"Estamos completamente tranquilos y seguros de que si hay una inspección se verá todo exactamente igual a lo que dicen los expedientes", insistió.
El propietario de 'Don Simón' factura unos 500 millones de euros, de los que el 51% corresponde al negocio de zumos y el 35% a la división de vinos, mientras que el resto proviene de los segmentos de bebidas de frutas (11%) y gazpachos y cremas (3%).
