MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La filial española del operador logístico Gefco espera terminar el año con una facturación de 300 millones de euros, un 6,6% más que en 2009, cuando obtuvo 281 millones de euros, y todo ello "a pesar de la grave crisis económica, la subida del IVA y la finalización de las ayudas en el sector automovilístico", afirma el director general de Gefco España, Dulcé Díaz.
La empresa gala, que celebra el vigésimo quinto aniversario de la filial española, obtuvo en 2009 un volumen de negocio de 2.900 millones de euros, mientras que su objetivo es terminar este año con un aumento del 23%, llegando a los 3.300 millones de euros, según el director general de Gefco, Yves Farges.
Para lograr esta cifra, ha destacado que las áreas de negocio clave durante los últimos años han sido la logística de aprovisionamiento, con la que consiguió 1.200 millones de euros en 2009, la logística de distribución, obteniendo 1.500 millones de euros, y el transporte marítimo 'overseas', con 200 millones de euros. Respecto a los dos primeros se encuentran bastante consolidados, y es en el terreno marítimo donde ponen más empeño de cara al futuro, según Farges.
Respecto a las áreas geográficas claves para el crecimiento de la empresa gala, el director general señala Europa Occidental, Europa Oriental y Centro y América del Sur, que generaron el pasado año 2.283 millones de euros, 404 millones de euros y 190 millones de euros, respectivamente.
En cuanto a Gefco España, Díaz apunta que los principales objetivos están en los sectores de la gran distribución, especialmente en la actividad alimentaria, en la cosmética y las dos ruedas. El presidente de Gefco España asegura, que "son tres sectores estratégicos donde hay muchas sinergias".
Por último, los responsables de Gefco han presentado una nueva actividad logística en España. Se trata de un Almacén-avanzado-fábrica (MAF) que se pondrá en marcha el próximo 1 de noviembre y que surge como respuesta a los proveedores que se encuentran a más de 1.200 kilómetros. Consiste en una planta que está situada en Miranda de Ebro (Burgos), y a la que llegarán camiones de Europa con piezas para las fábricas de la Península Ibérica, ya que si son piezas que destinadas a una sóla fábrica no llenarían un camión.
Además, esta última propuesta creará 12 puestos de empleo para ciudadanos del pueblo, lo que 'en tiempos de paro y crisis económica' ayudará al crecimiento de Miranda.
