Economía/Empresas.- El presidente de la inmobiliaria Contsa pasa su segundo día en la cárcel

Actualizado: domingo, 5 octubre 2008 15:13

SEVILLA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Contsa Corporación Empresarial, José Salas, quien ingresó en prisión el pasado día 3 tras declarar como imputado en los juzgados de Sevilla por la ampliación de las denuncias de dos acreedores de la empresa, al conocer que la entidad --declarada en suspensión de pagos-- tenía un déficit de 86,82 millones de euros, ha pasado su segundo día en la cárcel "con ánimo y ganas de salir adelante".

Según explicó hoy en declaraciones a Europa Press el portavoz de la empresa, Pablo del Río, Salas "se encuentra bien" y sus abogados están "estudiando" la situación ante la posibilidad de recurrir al auto de prisión, motivo por el que pueden reunirse en los próximos días.

Del mismo modo, aseguró que, a pesar de las circunstancias, se mantiene la reunión convocada por el empresario con los acreedores en el hotel Alcora de San Juan de Aznalfarache (Sevilla) para el próximo jueves 9 de octubre. Todos los acreedores que figuran en el proceso concursal están convocados a este acto, en el que Salas pretendía "ofrecerles llegar a un acuerdo mediante convenio voluntario de acreedores" por el cual cobrarían la mitad de la deuda en un plazo de cinco años.

El Juzgado de Instrucción 17 de Sevilla decretó prisión comunicada y sin fianza para José Salas por "la gravedad de los delitos societarios que se le imputan". Los administradores concursales alertaron en un informe presentado en el Juzgado de lo Mercantil, que tramita la suspensión de pagos de la sociedad, de que Contsa tiene 1.653 acreedores, de los cuales 1.586 son inversores --cifra que choca de manera frontal con los 609 acreedores que reconocía José Salas--, así como un activo de 28,4 millones.

Salas dijo hace un mes a Europa Press que iba a impugnar el informe emitido sobre su empresa debido a la "falta de rigor y falta de exactitud de dicho informe". El empresario precisó que este informe afecta "de forma sustancial" tanto al activo, en el que, a su juicio, "se minusvaloran bienes conforme al criterio de crisis actual e ignoran derechos de adquisición y edificación y posibilidades de transacción de importante valor en la actividad inmobiliaria"; como al pasivo, en el que, según apuntó, "se aprecian tanto inversiones desdobladas, imputando la titularidad de un único contrato a diversos acreedores agrupados en el mismo, a los que incluso se les llega a asignar la totalidad de su importe a cada uno de ellos, como la simple duplicidad en la contabilidad, o la inclusión en los créditos de cantidades ya percibidas por inversores a cuenta del capital".

Asimismo, lamentó que cierto número de inversores decidieran abrir la vía judicial, "que lejos de resultarles beneficioso puede redundarles además graves perjuicios". No obstante el empresario aseguró que, siguiendo su larga trayectoria de 20 años, defenderá en el terreno judicial, "hasta sus últimas consecuencias", tanto su interés "como el de aquellos inversionistas que decidieron confiar en momentos de crisis".

Contsa se declaró en suspensión de pagos el pasado mes de febrero ante la caída del mercado inmobiliario unida a las fuertes restricciones del crédito existentes, por lo que solicitó a la jurisdicción mercantil competente la incoación de un concurso voluntario de acreedores que estableciera las bases de un convenio que permitiera satisfacer sus obligaciones económicas respecto a sus socios e inversores así como su continuidad en el sector.